El Reina Sofía asegura que la exhibición de la muerte a martillazos de una vaca no vulnera la ley

El Museo de Arte Reina Sofía ha emitido un comunicado en referencia a la denuncia presentada por la organización Amnistía Animal contra el artista Jordi Benito y la pinacoteca por supuesta apología de un delito de maltrato animal. En él  explica que el único límite la libertad de expresión de los artistas es la legislación vigente y que en ningún momento se desprende del video, que la organizción ha denunciado, una incitación directa a la perpetración de un delito, ni se ensalza la comisión de un crimen.

El comunicado dice que el video, objeto de la denuncia en cuestión, ha sido presentado en el marco de la exposición “El arte sucede. Origen de las prácticas conceptuales en España. 1965-1980”, que se ha exhibido en este Museo desde el 11 de octubre 2005 hasta el pasado 9 de enero. Esta obra corresponde a una grabación realizada en 1980. El Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía asegura que respeta los contenidos artísticos de todos los creadores ya que una de "las finalidades específicas de la institución es la difusión de las distintas tendencias artísticas contemporáneas".

Como límite a la libertad de expresión de cualquier artista, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía dice someterse en todo los casos a la legislación aplicable, siendo obligación del centro que las obras expuestas en ningún momento transgredan dichas normas.

"En el caso que nos ocupa no es aplicable el artículo 18 del Código Penal dado que en ningún momento se desprende del video una incitación directa a la perpetración de un delito, ni se ensalza la comisión de un crimen", dice el comunicado . El  Museo explica que advierte mediante un cartel expuesto en un lugar bien visible que las imágenes visionadas podían herir la sensibilidad de los visitantes.

"La gente salía horrorizada"

"La gente salía horrorizada tras ver el vídeo", afirma la presidenta de Amnistía Animal Madrid, Matilde Cubillo. Desde el mismo museo llamaron a agentes del Seprona de la Guardia Civil, que se personó en el Museo Reina Sofía y comprobó las imágenes que se estaban emitiendo, levantando el acta correspondiente.

Cubillo aseguró en declaraciones a 20minutos.es que "los responsables del Museo hablaron con la Guardia Civil y alegaron en su defensa que las imágenes fueron grabadas en los años 80, quitando importancia a lo que allí se estaba exponiendo. Sólo un pequeño cartel anunciaba que las imágenes podían herir la sensibilidad".

Instrucción de diligencias

Fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid dijeron que "se van a instruir diligencias y se va a dar cuenta a todos los organismos competentes para que se involucren en este asunto, pues las imágenes que se han expuesto podrían ser un delito que está tipificado en el Código Penal, aunque hay que estudiarlo porque fueron grabadas en los años 80".

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