La presidenta de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Rafaela Romero, ha condenado el último caso de violencia de género registrado en la localidad guipuzcoana de Irún, donde un hombre de 33 años ha sido detenido por la Policía Municipal acusado de quebrantar una orden de alejamiento, y ha incidido en la importancia de los protocolos para "neutralizar más eficazmente" la violencia machista.

Asimismo, en un comunicado, ha condenado lo ocurrido en Villabona, donde un hombre ha sido arrestado acusado de abusos sexuales por efectuar tocamientos a dos menores.

Según Romero, con cada caso de violencia machista "se incide en la importancia de los protocolos de detención y actuación existentes para atajar la violencia contra las mujeres". "El primero, que se cumplan las órdenes de alejamiento que, legalmente, han sido requeridas porque no debe haber espacio para la ambigüedad o permisividad", ha aseverado.

La presidenta del Parlamento foral guipuzcoano ha señalado que es necesario tener en cuenta "la presión psicológica que ejerce el maltratador hacia su víctima que, en muchas ocasiones, está absolutamente bloqueada y no sabe cómo actuar".