Desde el pasado día 1 de septiembre y a lo largo de la semana, una nueva promoción de 25 jóvenes castellano-manchegos se ha ido incorporando a sus respectivos centros educativos en Irlanda, para cursar allí primero de Bachillerato dentro del Programa Curso Académico de la Consejería de Educación, Ciencia y Cultura.

El alumnado participante proviene de los las cinco provincias de Castilla-La Mancha: siete de los alumnos son de Albacete; seis de Ciudad Real; uno de Cuenca; dos de Guadalajara, y nueve de Toledo, ha informado la Junta en nota de prensa.

Las familias de los estudiantes ha recibido ayudas económicas para realizar el curso que oscilan desde aquellas que comprenden el 100 por 100 del precio del curso (14.128 euros) para las familias en desempleo, hasta los 1.356 euros que reciben las familias con renta per cápita superior a los 12.152 euros, así hasta alcanzar los 208.000 euros de que consta la inversión realizada para el desarrollo de este programa.

El procedimiento de adaptación por el que habrán de pasar los alumnos es de un mes aproximadamente: deberán adaptarse a una nueva cultura, vivir con otra familia, asistir a un nuevo centro educativo en el que convivirán con nuevos compañeros de clase y, sobre todo, a que toda la información que reciban sea en una lengua extranjera.

Los estudiantes residirán en familias irlandesas, en régimen de pensión completa, y realizarán sus estudios en centros ordinarios de Enseñanza Secundaria, cursando el equivalente a nuestro Primer Curso de Bachillerato en España, por lo cual las enseñanzas se convalidan de manera automática.

Antes de que comience el curso se les facilitarán los uniformes, que para el asombro inicial de nuestros alumnos son obligatorios en la práctica totalidad de los colegios irlandeses, así como los materiales curriculares que habrán de utilizar y la figura de un tutor o coordinador que realizará in situ el seguimiento de su evolución.

En cualquier caso, y a pesar de las dificultades y sorpresas iniciales, en la primera visita de control que se desarrolla todos los años en el mes de octubre, ya se pueden observar importantísimos avances en el uso del inglés, puesto que todas las entrevistas con nuestros estudiantes se desarrollan en el idioma de Shakespeare. SASTISFECHOS

Según las experiencias de otros años, los centros educativos irlandeses se muestran muy satisfechos por labor desarrollada por nuestros alumnos, y no sólo por los resultados académicos, sino también por el alto grado de implicación en las actividades del centro educativo, así como con las familias, los profesores y los compañeros con quienes conviven en tierras irlandesas.

Por su parte, y de manera generalizada, las familias de los estudiantes valoran muy positivamente la coordinación y trato personalizado que desde la Consejería de Educación, Ciencia y Cultura de Castilla La-Mancha se viene realizando todos los años, mediante una función tutorial y el seguimiento a distancia de la evolución académica y personal del alumnado.

Todos los alumnos castellano-manchegos que han realizado el Programa de Curso Académico en Irlanda describen esta actividad como una experiencia única en sus vidas que les ha permitido no sólo llegar a dominar con fluidez un segundo idioma, sino que además les ha aportado un mayor grado de madurez personal en todos los ámbitos y sentidos.