Los comerciantes del Mercat Central de Tarragona han manifestado su "indignación y preocupación" por la gestión del proyecto de remodelación de este espacio comercial, que sigue estancado tras 11 años de reivindicaciones.

El presidente de este colectivo —que lleva casi tres años en un recinto provisional—, Albert Ribot, ha llegado a pedir que si los miembros del consistorio "no son capaces de construir este equipamiento, que no toquen nada más, que arreglen las calles, que restablezcan las líneas de autobús y que den un uso al edificio antiguo".

"Si no saben, que lo dejen, pero si no son capaces de llevar a término este proyecto, me pregunto cómo podrán hacer avanzar una ciudad", ha comentado.

Ribot ha criticado que, dada la demora en el inicio de las obras, se utilicen "esos 2.600 metros cuadrados en pleno centro de la ciudad" para generar algún reclamo para los clientes.

En concreto, se ha referido a la vieja idea, que contaba con los pertinentes estudios de mercado, de instalar una pista de hielo. En este sentido, ha confirmado que la exposición que organizó Bancaja en el antiguo mercado logró "un gran movimiento de gente".

Los comerciantes han destacado el impacto "largo e intenso" de las excavaciones arqueológicas, a su juicio una maniobra dilatoria que ha costado ya tres millones de euros, "cuya falta de lógica incluso ha sido cuestionadas por el presidente de la Sociedad Arqueológica de Tarragona, Rafel Gabriel".

En el entorno del Mercat Central, según sus datos, la caída de las ventas es de "entre el 50 y el 75%", y se han visto obligados a cerrar el 20% de los establecimientos, 32 en total.

También han acusado al Ayuntamiento de "menosprecio" hacia ellos, pues no les han facilitado la información requerida en el Consejo de Administración de la empresa municipal de mercados, y han recordado que los créditos para acometer la obra (presupuestada en 38 millones de euros) "no están firmados" y la aportación de ocho millones de euros del Estado "no está comprometida".

Tanto el presidente de los comerciantes del Mercat Central como el presidente de la Cámara de Comercio de Tarragona, Albert Abelló, han advertido sobre sus sospechas de que la gestión del aparcamiento de más de 300 plazas que se excavará bajo el mercado se concederá a una empresa privada.

"Por eso no habrá aparcamiento a un precio razonable en todo el centro de Tarragona". Abelló ha remarcado, además, que el actual aparcamiento municipal de Corsini (casi 800 plazas junto al Mercat Central), que estará conectado con el nuevo, también entrará en la operación, "pues es muy complicado amortizar un parking de siete millones de euros con solo 300 plazas".

Los comerciantes del interior del Mercat Central están a la espera de la reunión que mantendrá el alcalde, Josep Félix Ballesteros, el próximo jueves con el tejido comercial del entorno, que ya ha amenazado con cortar el tráfico el próximo día 7 de septiembre en el inicio del curso escolar.

"Es un problema conjunto, aunque no hemos sido convocados, como si no tuviéramos nada que decir; el Mercat estará al lado de los comercios del exterior", ha adelantado Ribot.