El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha afirmado que las "dudas" que tenía ante la moción de censura presentada en Moraleja (Cáceres) por el PSOE y el nuevo concejal del IPEX, ya que "no" es "excesivamente partidario" de ellas, se le "han quitado", ha dicho, "al ver la reacción del PP".

Vara ha apuntado que "la misma legitimidad tiene", cuando "no" hay "mayoría absoluta, que el concejal independiente apoye a uno que apoye a otro, cuando ambos —PP y PSOE— tienen seis concejales".

El jefe del Ejecutivo autonómico ha manifestado en rueda de prensa en Mérida tras recibir a un grupo de niños saharauis que, "por principios", es "un firme defensor de la estabilidad política", por lo que ha asegurado que "no" es "excesivamente partidario de las mociones de censura, si no se dan esas circunstancias excepcionales".

Al respecto, ha recordado que en Moraleja se han dado "algunas circunstancias excepcionales", ya que una persona elegida por los ciudadanos, "no" pudo "durante un tiempo", ser concejal de su localidad, en referencia al edil en el ayuntamiento moralo Juan David Pérez Chaparro, número 2 de la coalición, según aparecía en listas del IPEX en las elección municipales de mayo de 2007.

De esta forma, Fernández Vara ha indicado que "las mociones de censura deben ser excepcionales" y ha señalado que esta "excepcionalidad" la juzgan "los que viven en ella".

Finalmente, en cuanto a la posible querella anunciada por los concejales socialistas de Moraleja (Cáceres) Teresa Roca y Felipe Mayoral contra el secretario general del PP de Extremadura, Fernando Manzano, el presidente del Gobierno regional ha destacado que se trata de un pleito "a título individual" y que "sólo faltaría" que él "tenga que autorizar" a "quienes ejercen su potestad de defender su integridad y su derecho al honor".