Sa Nostra ha afirmado que a finales del pasado año se rompió "el efecto llamada de mano de obra extranjera", coincidiendo con el cambio de la tendencia ascendente de la población activa balear. Según datos de la encuesta de población activa del INE, la participación laboral extranjera descendió interanualmente en el cuarto trimestre de 2009 un 4,1 por ciento, lo que supone la salida de efectivos extranjeros del mercado de trabajo regional por primera vez durante esta etapa de recesión.

Concretamente, ha apuntado Sa Nostra, atendiendo a la desgregación de los datos disponibles, este retroceso de la participación laboral extranjera se explica a raíz de la salida del mercado de trabajadores con pasaporte diferente al nacional (-12 por ciento), fundamentalmente de origen extracomunitario, con un 14,3 por ciento menos frente al descenso del 6,4 por ciento de los comunitarios.

Sa Nostra ha señalado también que la afiliación de trabajadores de nacionalidad extranjera a la seguridad social cayó un 10,9 por ciento, tasa que no sólo borra el signo positivo del pasado ejercicio (2,9 por ciento) y se erige como el peor resultado de los últimos diez años, sino que duplica prácticamente el descenso experimentado por los trabajadores de nacionalidad española (-5,6 por ciento frente el -1,6 por ciento de 2008).

La entidad ha apuntado que buena parte de este resultado se explica por la caída de la afiliación entre los trabajadores de origen no comunitario (-13,1 por ciento frente al -8,1 por ciento de los comunitarios).

Por otra parte, la contratación laboral de trabajadores extranjeros mermó a lo largo del año un 21,9 por ciento (frente al -9,8 por ciento de 2008), descenso que una vez más, vuelve a superar el de los trabajadores españoles (-18,3 por ciento frente al -15,2 por ciento de 2008).

Cabe señalar que esta tendencia responde, según la entidad bancaria, a la caída de las contrataciones de los efectivos con pasaporte no comunitario (-27,2 por ciento frente al 16,1 por ciento de 2008), pero también al desfallecimiento de las nuevas contrataciones de los europeos (-11,9 por ciento frente al 5 por ciento de 2008).

Sa Nostra ha recordado también que los contadores del paro cerraron el ejercicio con una media de 20.306 extranjeros desocupados, cifra nunca vista hasta entonces que enfiló la representatividad de este colectivo hasta el 27,3 por ciento de la bolsa de desocupación total.

Como consecuencia, la tasa de paro avanzó hasta el 29,9 por ciento de la población activa extranjera (frente al 16,5 por ciento de 2008), con lo que se amplió el diferencial respecto a los trabajadores de nacionalidad española (14 por ciento frente al 8 por ciento de 2008).

Continuidad en 2010

Sa Nostra ha afirmado que el desfallecimiento de la población activa extranjera ha tenido continuidad durante el primer semestre de 2010 y se ha focalizado en el segmento de los efectivos de origen extracomunitario (-5,4 durante el segundo trimestre), mientras que los comunitarios han recuperado el signo positivo (23,8 por ciento en el segundo trimestre).

La entidad ha destacado que la tendencia a la baja se ha gestado, concretamente, en el segmento masculino (-9,9 por ciento), mientras que el femenino ha permanecido estable (0 por ciento).