Los agentes de la Brigada de Medio Ambiente de la Policía Foral han realizado 15 inspecciones a acampadas autorizadas por el Instituto Navarro de Juventud (INJ) y repartidas por la geografía foral, sin encontrar en ninguna de ellas irregularidades de importancia.

En estos controles los policías prestan atención tanto a la acreditación de los monitores como a los aspectos de seguridad y medioambientales que rodean al campamento, regulados en el Decreto Foral 107/2005.

El Gobierno de Navarra ha autorizado, a través del INJ, 46 acampadas para la temporada de 2010. Estas actividades son controladas de forma coordinada y atendidas las 24 horas del día por el INJ, la Agencia Navarra de Emergencias (ANE) y la Brigada de Medio Ambiente de la Policía Foral, según ha explicado el Ejecutivo en un comunicado.

En concreto, se revisan aspectos relativos a la seguridad, como la ubicación correcta de la acampada, acorde con la solicitud; los puntos de encuentro en caso de situaciones de emergencia; y el material sanitario disponible.

También se comprueban ciertas medidas de precaución sanitaria en la calidad del agua y en la conservación y manipulación de alimentos; y de organización, como la acreditación y contacto de los monitores o la autorización de los padres y tutores para los mejores. Además, la Policía Foral también vigila que se esté realizando una gestión adecuada de los vertidos y basuras.

El pasado 21 de julio, dos campamentos autorizados por el INJ tuvieron que ser asistidos por la ANE con motivo de las últimas tormentas. Tras este episodio, patrullas de la Policía Foral han venido desarrollando el servicio por la zona para comprobar el desarrollo de las actividades.