La Policía Nacional de Gijón ha detenido a tres comerciales de una empresa de gas que recaudaban dinero extra mediante el conocido como 'timo del gas'. Los tres hombres sobrepasaban sus competencias de captación de clientes y se hacían pasar por revisores de la instalación y de las calderas para conseguir mayores ingresos.

Los agentes pudieron identificar a los presuntos autores de la estafa gracias a un vecino de 84 años que, el pasado 7 de julio, denunció haber sido víctima del hurto de 1080 euros por dos individuos que se identificaron como revisores del gas. Los supuestos técnicos alegaron que era preciso y obligatorio efectuar la revisión.

Mientras uno de ellos se quedaba en la cocina, el otro revisaba la casa "para controlar la instalación". Los hombres explicaron que debían volver al día siguiente y, cuando se marcharon, el dueño de la casa comprobó que le habían desaparecido 1080 euros de la habitación de matrimonio. El hombre volvió a recibirles al día siguiente por temor a que le cortasen la instalación y, tras repetir la misma operación, le sustrajeron otros 350 euros.

Los comerciales regresaron un tercer día pero la mujer de la víctima no les abrió la puerta y llamó a la Policía. Los agentes comprobaron que los presuntos autores trabajaban en una empresa instaladora de gas pero en calidad de comerciales, sin potestad para efectuar cobros a los clientes. No era la primera vez que lo hacían, uno de ellos había sido detenido por apropiarse de 1600 alegando un cambio total de la caldera y 2600 euros sustraídos a una mujer de un cajón de la cocina.