Agentes de Policía Nacional han desmantelado un clan familiar implicado en más de cincuenta delitos contra el patrimonio que se dedicaba a robar con fuerza en concesionarios de vehículos de alta gama, ha informado este jueves la Jefatura Superior de Policía de Madrid, que ha confirmado a Europa Press que del total de robos, siete se perpetraron en concesionarios de Seseña (Toledo) y 13 en la provincia de Ciudad Real.

El grupo en cuestión había alcanzado un alto grado de especialización y refinamiento y llevaban a cabo sus actividades delictivas de forma planificada y organizada. En alguna ocasión llegaron, incluso, a sustraer en una noche seis vehículos de un mismo concesionario.

Los detenidos habían perfeccionado un sistema de ocultación de los vehículos sustraídos para lo que contaban con "puntos de seguridad", donde manipulaban las matrículas de los coches robados con máquinas troqueladoras para usarlos en otros hechos delictivos.

La investigación, llevada a cabo por el Grupo XXI de la Brigada Provincial de Policía Judicial, junto con sus homólogos del Grupo II de la Comisaría de Distrito de Usera-Villaverde, comenzó el pasado mes de febrero.

Tras arduas gestiones policiales, entre las que se desarrollaron complicados dispositivos de vigilancia y seguimientos, la investigación dio resultado y los agentes averiguaron todo el entramado criminal establecido por este clan familiar deteniendo a los siete integrantes del mismo.

Con la preceptiva autorización judicial, los agentes procedieron a la entrada y registro de tres viviendas en las que se recuperaron seis vehículos de alta gama, aparatos electrónicos, numerosas joyas, medicamentos y herramientas necesarias para llevar a cabo los hechos ilícitos. Los siete detenidos, que cuentan con numerosos antecedentes policiales, ya han sido puestos a disposición judicial.

En esta operación policial han colaborado los agentes de Policía Judicial de la Comisaría de Alázar de San Juan (Ciudad Real), de la Comisaría de Leganés, del Grupo de Atención al Ciudadano de Usera-Villaverde y el Equipo de Investigación de la Guardia Civil del puesto de Seseña.