Nadia Sahahbi es una mujer musulmana de 25 años que vive en Vitoria desde hace tres años. Hace unos meses acudió al centro de salud para pedir un volante al ginecólogo junto con su marido, ya que sufre un embarazo de alto riesgo, y el médico le pidió que se quitara el niqab, el velo que cubre toda la cabeza menos los ojos, a lo que ella se negó. La discusión subió de tono y fue necesaria la intervención de un agente de la Ertzaintza.Todo acabó con una denuncia por parte de Nadia al médico por trato vejatorio, y otra por parte del médico al marido de Nadia por amenazas.El juicio debería haberse celebrado este martes, el mismo día que en Francia se aprobaba la ley contra el velo integral, pero la jueza lo suspendió por la negativa de Nadia a quitarse el velo para su identificación. "Vengo nerviosa porque me van a pedir que me quite el niqab y no me lo voy a quitar. Lo haría ante la juez, pero no ante el público" comentaba Nadia a las afueras del Palacio de Justicia.La mujer alude a sus creencias religiosas y exige una sala en la que sólo haya mujeres y solo entonces se retirará el niqab. "Yo no lo llevo porque a mí me obliguen, no me obligan a llevarlo como dice la gente, no, es por lo que yo sé, por lo que yo siento, por pudor, por dignidad".La jueza la ha denunciado por desobediencia a la autoridad. Ahora está a la espera de que salga de nuevo la fecha del juicio.