La secretaria general del Partido Popular y presidenta de la formación en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, se ha acogido este sábado al "secreto del sumario" decretado por el juez instructor para no opinar sobre el caso de presunta corrupción en Alicante, en el que está implicado, entre otros, el presidente de la Diputación y presidente provincial del PP, José Joaquín Ripoll.

A preguntas de los medio con motivo de la clausura las jornadas de trabajo del Grupo Parlamentario Popular de las Cortes regionales, por la ausencia del juez que permitió la actuación policial el día de la detención por varias horas de los principales imputados, De Cospedal ha indicado que no va a entrar a valorar la actuación del citado juez.

En su opinión, quienes han hecho críticas sobre la presencia del juez ese día "están haciendo un flaco favor a la justicia". En todo caso, De Cospedal, que ha definido la operación como "operación Rubalcaba" en lugar de "operación Brugal", como se la conoce, ha criticado el despliegue policial y de medios habidos ese día.

Finalmente, ha responsabilizado de ello al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, considerando que la presencia policial, con agentes llegados de fuera de la Comunidad Valencia, fue "totalmente desproporcionada".