El consejero de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía, Antonio Ávila, se ha reunido este viernes en el municipio gaditano de Ubrique con una veintena de empresarios del sector de la piel y la marroquinería de Cádiz, en un encuentro en el que ha destacado la "fortaleza" de esta actividad, que genera en Andalucía un volumen de negocio que ronda los 600 millones de euros y emplea a 4.000 personas.

Según indicó la Junta en un comunicado, Ávila ha expuesto que Andalucía es la primera comunidad autónoma productora de artículos de piel, de manera que casi una de cada tres empresas (31,4 por ciento) que se dedican a esta actividad en España está en la región, seguida de lejos de Valencia (19 por ciento), Cataluña y Madrid (12 por ciento).

De las más de 1.600 empresas españolas del sector, medio millar tiene su sede en Andalucía y el 92 por ciento se concentra en la Sierra de Cádiz, siendo Ubrique el centro neurálgico de esta actividad, que ocupa también a pueblos del entorno como Prado del Rey, El Bosque, Algar y Villamartín.

En cuanto a los tipos de productos comercializados por el sector, el 64,4 por ciento de la producción la acaparan los bolsos y la pequeña marroquinería, seguida de otro tipo de manufacturas diversas (13 por ciento), los cinturones, los artículos de viaje y los guantes y manoplas.

Piel con i+D+I

El consejero ha aprovechado este encuentro para visitar la Instalación Científico-Tecnológica para el Desarrollo de Proyectos de I+D+I en Piel en Andalucía, cuyo objetivo principal es contribuir al desarrollo del sector de la piel y la marroquinería mediante la oferta de servicios avanzados a las empresas.

El centro trabaja en proyectos estratégicos que ayuden a la industria de la piel y fomenten campos como la innovación en el diseño de los productos; la mejora de la organización de la producción; el desarrollo de herramientas basadas en la aplicación de Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) en este sector o la búsqueda de la eficiencia productiva, entre otros. Su actividad está centrada tanto en empresas del ámbito de la marroquinería que quieren crear su marca, como en empresas de servicios que trabajen para otras marcas.

Ávila ha recorrido las dependencias del primero de los dos edificios que conforman la instalación y que alberga un Laboratorio de Ideas y un Centro Experimental de Materiales, además de oficinas y despachos, salas de formación y reuniones, sala de exposiciones y zonas de archivos. Para la construcción de este primer edificio, la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia ha aportado 2,11 millones de euros.

La instalación científico-tecnológica se completará con un segundo edificio donde se ubicará una Célula Experimental y un Laboratorio de Muestras, para el que Economía aportará 1,3 millones, un 30 por ciento del coste total del edificio y el equipamiento.