El Ayuntamiento ha encargado un repaso general a las fuentes públicas de la ciudad, con una inversión de 419.000 euros con la que se pretende remozarlas y repararlas como se hizo recientemente con 23 monumentos.

Los trabajos de mantenimiento se repartirán entre este año y los dos siguientes y se ocuparán de esta misión los técnicos especialistas de la empresa Aguas Residuales de Alicante (Emarasa).

Plaza de Magallanes

Aguas de Alicante contabiliza unas 40, otras tantas desaparecieron. Ocho de las principales están en el Paseo de Canalejas, plazas de la Misericordia, Santísima Faz, San Cristóbal (restaurada recientemente, pero no da agua), Músico Foglieti, calle San Vicente, y dos en la pedanía de Santa Faz (puerta del monasterio) y cerca de la sacristía.

«Somos más partidarios de las fuentes de piedra, en altura, como las originales, pero de las modernas, con chorros que salen del suelo y rejillas, también hay gente que les gusta», opina Juan José Amores, de la asociación cultural Alicante Vivo.

Una de las últimas renovadas, en la plaza de Magallanes (barrio de La Florida), precisamente ha suscitado este debate, porque a algunos vecinos no les agrada el diseño nuevo en vez del antiguo.

Siglos de historia en los chorros

Para quienes sientan curiosidad sobre la relevancia que llegaron a tener las fuentes públicas en otras épocas, cuando la población se abastecía en ellas para el consumo doméstico, Aguas de Alicante editó a finales del año pasado el libro titulado Agua corriente. Fuentes públicas de la ciudad de Alicante. Muchas ya no existen, pero se merecían perdurar como monumento.