Los 21 detenidos lo fueron en Andalucía --Cádiz-- y Castilla y León --Avila y Valladolid--, y entre ellos se encuentran los principales responsables de la red, que están acusados de delitos relativos a la prostitución, asociación ilícita y favorecimiento a la inmigración ilegal.

Se trata, en su mayoría, de ciudadanos y ciudadanas rumanos, aunque también hay dos españoles --el salmantino Manuel P.E. y el burgalés Jesús Roberto D.M.H.-- y un belga, Iuseppe S.

Durante la operación la Policía detuvo a otras 45 personas que infringían la Ley de Extranjería, varias de las cuales eran prostitutas de clubes de alterne que carecían de permiso de residencia en España.

Una prostituta logró denunciar

Las investigaciones comenzaron con la denuncia de una de las prostitutas que consiguió zafarse del control de la red y denunció la explotación a la que había sido sometida. A mediados del pasado mes de septiembre la Policía detectó en Chiclana a un primer grupo de nueve rumanos dedicado a traer ilegalmente a mujeres de Europa del Este para que ejercieran la prostitución, además de a la falsificación de documentos y al robo.

Tras practicar varios registros domiciliarios y detener a los sospechosos, las investigaciones permitieron localizar y arrestar al resto de componentes de la red en las localidades de Medina del Campo (Valladolid), Tordesillas (Valladolid) y Arévalo (Avila).

Simultáneamente, la Policía registró los prostíbulos 'El Palacio de la Rosa' en Medina del Campo y el Club Taji en Tordesillas donde arrestó, en el primero de los locales a 24 mujeres y en el segundo a 8.

En los registros efectuados por la Policía en Cádiz, Ávila y Valladolid, se intervino, entre otros, casi 35.000 euros, varios teléfonos móviles, una pistola simulada, una catana, dos vehículos, fotografías de los miembros de la red y documentación relativa a las prostitutas, con edades comprendidas entre los 18 y los 34 años.