Se trata de un requisito al que obliga la ley de extranjería, y que si no se lleva a cabo, supone la pérdida de los derechos más fundamentales. En la capital hay 6.800 personas que deberían actualizar su empadronamiento, aunque es muy probable que bastantes de ellos ya no residan en Valladolid.

En los últimos días, y aunque el Ayuntamiento no ha facilitado los datos exactos, sí se ha notado un mayor aluvión de personas de distintas nacionalidades que han acudido a las oficinas del padrón.

Los tiempos de espera se han incrementado un poco por esta circunstancia. Ayer algunos afectados tuvieron que guardar cola durante unos 25 minutos.

Lo que hay que saber

¿Quiénes tienen que hacerlo?: Los que llevan más de 2 años  apuntados.

¿Dónde?: En el registro municipal, en la parte trasera del Ayuntamiento.

¿Y si no lo hacen?: Pierden el derecho a la sanidad y a la educación de sus hijos.

¿Qué hace falta?: Un pasaporte, el DNI o la Cédula de Inscripción.

Sabas Otalora

«Es la primera vez que vengo. Llevo medio mes en Valladolid y hoy me he empadronado. No me parece muy mal tener que venir cada dos años, las colas además son ágiles. Tengo permiso de trabajo y espero estar cinco años».

Vera Tapia

«Llevo seis años aquí. He venido a renovar mi inscripción en el padrón. Hombre, es un poco pesado tener que hacer cola, pero hay que hacerlo y ya está. Así son las leyes. Además, nos asegura unos derechos que está bien tenerlos».

Eddy Rueda

«Había oído que los extranjeros teníamos que renovar nuestra inscripción en el padrón y he venido para informarme. Sólo llevo un año y dos meses en España, así que me han dicho que todavía no me tocaba. Es a los dos años».