Empachos y alcohol disparan las urgencias sanitarias en Navidad

Los pacientes con problemas gástricos aumentan hasta un 25% debido a los excesos en las comidas familiares y de empresa.
Llega la Navidad. Y con ella las cenas de empresa, las comidas familiares, las reuniones de amigos... y también los empachos y las indigestiones. Las urgencias del hospital Miguel Servet reciben en estas fechas hasta un 25% más de pacientes, la mayor parte de ellos con problemas derivados de comidas demasiado copiosas y regadas con excesivo alcohol.

Acidez de estómago, diarreas, molestias intestinales y dolores hepáticos son las patologías más habituales, según indica el doctor José Luis Casado, jefe de urgencias del Servet.

Los fines de semana de Nochebuena y Nochevieja, ligados a las típicas reuniones familiares, son los que más urgencias generan. «En estas noches podemos llegar a atender en el hospital a varias decenas de pacientes que llegan con problemas digestivos», explica el doctor Casado.

Los primeros casos, sin embargo, se han registrado ya este pasado fin de semana, elegido por numerosas empresas para realizar sus cenas de Navidad. «Los pacientes suelen llegar de madrugada, algunos incluso con problemas de tensión», explica el doctor Casado.

A los casos provocados por excesos en la mesa se unen los pacientes que llegan a urgencias tras haber bebido demasiado alcohol y aquellos que se han visto implicados en peleas y accidentes de tráfico, más habituales en estas fechas.

Hasta tres kilos más en enero

Una comida con aperitivo (jamón serrano, queso, canapés), entrantes (marisco), primer plato (verdura y vino), segundo (pescado y patatas) y postre puede conllevar hasta el triple de calorías que lo habitual (unas 3.000). Consumir seis comidas así supone un aumento de peso de unos tres kilos, según Juan Revenga, presidente de la Asociación de Nutricionistas de Aragón.

Comer sin pasarse

Cien horas caminando: Librarse de los kilos ganados por las comidas navideñas (unos tres) equivale a caminar durante 100 horas.

Lo mejor, prevenir: El mejor método para combatir los excesos navideños es no caer en ellos y comer con mesura. «No hay que asociar celebración con exceso», aconseja Juan Revenga, presidente de la Asociación de Dietistas y Nutricionistas de Aragón.

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