Egibar dice que el hecho de que la izquierda abertzale "opte por vías pacíficas" le "rompe los esquemas al Estado"

Olano insta a que, "por encima de etiquetas que dividen", el nacionalismo fije "objetivos comunes" a favor del derecho a decidir

El presidente del GBB del PNV, Joseba Egibar, consideró hoy que el hecho de que la izquierda abertzale decida optar "unilateralmente" por "vías exclusivamente pacíficas y democráticas" le "rompe los esquemas al Estado", porque "previamente se tiene que producir el alto el fuego de ETA" para que éste pueda "gestionar y determinar los tiempos", a lo que añadió que si la banda terrorista "no se adviene" a la citada decisión se convertirá en "disidencia de la izquierda abertzale".

En un acto político en Beasain (Gipuzkoa), con motivo de la inauguración este mediodiía del batzoki de la localidad, Egibar, acompañado del diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, y del candidato del PNV a alcalde de este municipio, Aitor Aldasoro, señaló que en la izquierda abertzale "hay un factor determinante, la unilaterialidad, que ellos deciden por sí mismos y que no esperan a ETA".

"Llegan 30 años tarde, o cuando menos 12 años tarde, desde el pacto de Lizarra Garazi, pero unilateralmente deciden optar por vías exclusivamente pacíficas y democráticas", destacó. En este contexto, advirtió que "si ETA no se adviene a esa decisión se constituirá en disidencia de la izquierda abertzale".

Egibar consideró que esto "le rompe los esquemas al Estado, a Rubalcaba, porque previamente se tiene que producir el alto el fuego de ETA para que después ellos puedan gestionar y determinar los tiempos". "Nosotros no tenemos que esperar ni a unos, ni a otros porque nuestro camino está trazado", aseveró.

El presidente del GBB del PNV afirmó que "tarde o temprano unos y otros tendrán que admitir que existe un conflicto político" en Euskadi, y que su solución pasa "por el reconocimiento de la existencia del pueblo vasco y del derecho a decidir".

Además, lamentó que hay todavía quien piensa que ello es "una entelequia o una ensoñación del PNV", pero aunque "así sea, aunque haya divergentes y plurales convicciones sobre qué es el conflicto político" alguien "se va a tener que sentar en torno a una mesa si pretende solucionarlo".

"El PNV, ha dado pasos, se ha comprometido y arriesgado durante décadas en esa dirección y ni los cantos de sirena por un lado, ni la obstrucción y el bloqueo por otro, necesitamos emprender el camino", apuntó.

En definitiva, consideró que se está "contestando a las dos preguntas" recogidas en la consulta sobre el derecho a decidir impulsada por el ex lehendakari, Juan José Ibarretxe, y prohibida por el Gobierno central, por un lado, "si se acepta que se pueda dar un proceso dialogado del final de la violencia siempre que ETA manifieste su voluntad de abandonar definitivamente la estrategia violenta", a lo que "están respondiendo determinadas acciones y decisiones".

En segundo lugar, recordó, si se acepta el inicio de un proceso de negociación por parte de "todos los partidos políticos sin exclusiones para acordar el ejercicio del derecho a decidir del pueblo vasco".

A su juicio, hay que seguir "respondiendo a estas dos cuestiones", recogidas en la consulta que "prohibieron, sin que el problema haya desaparecido, porque la prohibición lo agranda, salvo que lo olvidemos". Egibar insistió en que los "límites de la política vasca" están en "no enfadar al Estado", aunque luego "ellos te pidan ayuda para desplazar al otro y viceversa", apuntó en alusión al PP y PSE.

A ambas formaciones les acusó de "ponerse de acuerdo para controlar el mapa electoral vasco, el nacionalismo y desplazar en este caso al PNV".

"discusion virtual"

Egibar se refirió a la interpelación que realizó el viernes en el Parlamento vasco al lehendakari, Patxi López, sobre su visión de la pacificación, que se convirtió, tras publicarse ese mismo día en los medios la reflexión del presidente del PSE, Jesús Eguiguren, sobre la izquierda abertzale, en "una discusión virtual entre un lehendakari que contesta no se sabe a quién, desde luego no al PNV".

El dirigente jeltzale destacó lo que "subyace en la reflexión" de Eguiguren, que es que "la política tiene, también para los nacionalistas, unos límites, no enfadar al Estado", porque lo demás "tiene instrumentos y poderes que aplicar sobre quien pretenda o vaya a superar no sé que determinados marcos".

A su juicio, la propuesta del presidente de los socialistas vascos supone "el reconocimiento explícito de que todo obedece a un diseño político" porque "dice expresamente que el tema de la ilegalización, por ejemplo, ha podido ser muy efectivo en el inmediato pasado pero que puede resultar contraproducente en el inmediato futuro", lo que supone que "la ilegalización, el sacar o meter a 120.000 personas del saco electoral, depende del diseño político que tengan" los socialistas.

"¿Qué democracia es ésa?", se preguntó, para, a continuación acusar al PSE de intentar "utilizar la Ley en función de si perjudica o beneficia a esa estrategia de Estado".

Por su parte, Olano apuntó como reto actual del nacionalismo aunar "una mayoría social y democrática detrás del derecho a decidir" del pueblo vasco y apeló al "trabajo conjunto" entre nacionalistas. En este sentido, consideró que "las diferentes etiquetas que se dan en el nacionalismo, de izquierdas, de derechas, ecologista, no hacen otra cosa que dividir y esa división genera debilidad".

De este modo, consideró que "en el mundo del nacionalismo se debe lograr, por encima de estas etiquetas que nos dividen, una serie de objetivos comunes que establezcan el camino compartido que lleve a impulsar una mayoría democrática que a su vez impulse el derecho a decidir".

Al mismo tiempo abogó por un "nuevo modo de hacer política" que "acerque" a la ciudadanía, y consideró que "el euskara e Internet" deberán de ser los conceptos que "marquen la línea estratégica del nacionalismo" para que éste se "adapte rápidamente" a los cambios que está experimentando la sociedad.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento