Así, desde la organización indicaron que es "un paso más para desmantelar todas las cautelas existentes para controlar la especulación urbanística" que, a su juicio, "se justifica en campos de golf que se han demostrado inviables económicamente".

Precisaron en un comunicado que la modificación viene a "eliminar barreras" para la construcción de instalaciones y, además, apuntaron que favorece el desarrollo de urbanizaciones "ligadas a estas supuestas instalaciones deportivas". "Es un giro más en beneficio de los promotores urbanísticos y de la economía del ladrillo, responsables en buena parte de la gravísima crisis que padecemos", aseveraron.

A juicio de la Federación Provincial de Ecologistas en Acción estos cambios realizados por el Ejecutivo autonómico "es un auténtico despropósito" que, auguraron, "tendrá graves consecuencias a corto, medio y largo plazo", con una vuelta al "nefasto y fracasado modelo de recalificaciones masivas, expansión injustificada de núcleos urbanos, etcétera".

Para la asociación, esta modificación es "irresponsable" y está "abocada al fracaso". Igualmente, precisaron que "contradice los compromisos de la Junta de Andalucía y el Gobierno central de promover un nuevo modelo de desarrollo basado en el conocimiento, la innovación y la educación".

Según los ecologistas, el hecho de que "prácticamente se hayan paralizado los proyectos de macrourbanizaciones asociadas o justificadas no se debe a las trabas burocráticas sino a la propia inviabilidad de las instalaciones de golf". Criticaron, por tanto, a las administraciones públicas por "promocionar estas instalaciones permitiendo la especulación con unos suelos que en teoría deben dedicarse a un uso deportivo".

Por último, aludieron a que el golf, "según las estadísticas de la Consejería de Turismo, sólo atrae a menos de un uno por ciento de los turistas que visitan Andalucía", por debajo de los que acuden a visitas culturales, espacios naturales o para disfrutar de la gastronomía. En este punto, añadieron que el centenar de campos de golf de la región "ocupan una superficie de 60 millones de metros cuadrados y consumen 50 millones de metros cúbicos de agua, el equivalente a una ciudad de 500.000 habitantes".