En rueda de prensa, Gimeno quiso dejar claro que el Gobierno de Zaragoza "tiene una línea de trabajo" se mostró convencido de que "seguro que habrá una línea de continuidad".

Al respecto, apuntó que esta línea de mantendrá en la comisión técnica municipal que estudia aplicar medidas de austeridad tras el decreto ley de ajuste del déficit para añadir que "se mantiene el compromiso del equipo de gobierno de cerrar en dos meses esas medidas de ajuste".

Puesto que la plaza a la que opta Catalá en el concurso de méritos al que se presentó el pasado mes de mayo se tiene que resolver en una plazo de unos 15 días, Gimeno estimó que esta situación de interinidad "será muy pequeña y pronto se verá si avanza o no".

A su parecer, que la Consejería municipal de Economía esté en situación de posible interinidad, "no le veo más dificultad que a otras áreas" para apreciar que "unas son más verticales y otras más horizontales" para subrayar que "la prioridad es la acción social".

"La situación no la veo más complicada que la gestión de una economía familiar" sentenció al sintetizar que "es adecuar los ingresos y los gastos" y simplificó que la economía "es cuadrar cifras, mientras que en otras áreas es tratar con personas y, a veces, es más difícil hablar con las personas que con los números".

Sobre su posible asunción del área de Economía, Gimeno estimó que "me temo que habrá muchos candidatos" y puntualizó que será el alcalde, Juan Alberto Belloch, "quien lo decida". Recordó que el propio alcalde ya declaró ayer que si se le adjudica a Catalá la plaza "se tomará la decisión correspondiente".

En el caso de que finalmente Catalá no ganara el concurso de méritos y no lograra la plaza de la Embajada en Chile "no pasa nada y todo pasa por la disposición del alcalde, por principio".

Gimeno calificó de "improcedentes" las declaraciones del grupo municipal del PP que tildaron de "huida en toda regla y una nueva irresponsabilidad" la decisión de concursar de Catalá.

"Ellos son responsables de sus palabras y no tengo nada más que decir" dijo Gimeno para quien es "respetable que uno participe en un concurso de méritos" y en tono irónico apuntó que "igual ahora lo quieren tanto y lo mejor quieren que continúe" para estimar que "igual tienen suerte y no se va".

Antes de concluir, quiso apostillar, a título personal, que "es difícil decir a alguien a quien se aprecia que no puede pedir una plaza".