Un buque con base en Ribeira se enfrenta a la mayor sanción de Estados Unidos por pescar sin licencia

La compañía "se siente inocente de los hechos" y colabora con las autoridades para su esclarecimiento

Un pesquero de bandera española y base en Ribeira (A Coruña), perteneciente al grupo atunero Albacora, se enfrenta a una posible multa de 7,4 millones de dólares (unos 6 millones de euros) por faenar en aguas de Estados Unidos sin permiso de este país, una sanción que en caso de ejecutarse sería la más alta aplicada por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA).

Según informa este organismo norteamericano, se acusa al buque 'Albacora Uno', un cerquero congelador dedicado a la captura de atún, de desplegar 67 dispositivos de pesca dentro de la zona económica exclusiva del país entre noviembre de 2007 y octubre de 2009.

La propuesta de sanción deriva de una investigación desarrollada por los inspectores de esta agencia cuando el buque estaba amarrado en el puerto de Pago Pago en marzo pasado. Los agentes hallaron en la embarcación registros que documentaban las actividades del atunero en aguas estadounidenses.

La normativa estatal prohíbe a los pesqueros de bandera extranjera faenar en aguas estadounidenses sin contar con una licencia del país, que el buque español "no tenía".

Albacora niega las acusaciones

Albacora, que asegura que su buque "nunca ha pescado en la zona económica exclusiva de Estados Unidos", dispone de un plazo de 30 días, prorrogable a 60, desde la recepción de la notificación para presentar alegaciones, según informó la propia compañía en un comunicado.

"En ningún momento se ha producido captura alguna (ni tan siquiera de un solo túnido) en aguas en las que estuviese prohibido hacerlo", recalcó la empresa, que asevera que está colaborando con las autoridades estadounidenses y españolas en el "esclarecimiento de las circunstancias que rodean el caso".

Una delegación de la compañía se ha desplazado a Estados Unidos para facilitar a las autoridades del país "toda la información que puedan requerir".

Albacora, que recalca que el cumplimiento de la normativa internacional constituye "más allá de una obligación jurídica, un auténtico compromiso de empresa", insiste en que "se siente inocente de los hechos de los que se acusan" al 'Albacora Uno'.

No obstante, afirma que asumiría la responsabilidad que le pueda corresponder por las "actuaciones de sus capitanes o técnicos de pesca, de ser cierto que se produjeron en los términos expresados por la NOAA".

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