A su juicio, "para una empresa, primero son sus trabajadores; segundo, la tecnología y tercero, el capital que necesitan para desarrollar sus iniciativas", pero "la conjunción de los mejores trabajadores con los mejores empresarios es lo que nos permite tener plena confianza en el futuro industrial de Monzón, de Aragón y de España", afirmó.

Iglesias también se refirió a las dificultades de las empresas y la sociedad en la actual coyuntura económica, para recordar que uno de los grandes logros de la Unión Europea ha sido "conjugar el hecho de ser la economía más importante del mundo con un potente estado de bienestar" y aclaró que "no vamos a renunciar a ninguno de los dos aspectos, por eso hemos tenido que hacer un gran esfuerzo de ajuste, imprescindible si queremos una economía capaz de competir y ése es el gran reto al que nos enfrentamos".

El presidente aragonés recordó que las empresas aragonesas han sabido hacer frente a otros momentos de dificultades y citó el ejemplo del grupo industrial Vicente Canales, que "ha pasado por momentos complicados y ha sabido adaptarse a las necesidades del mercado" adecuando su producción.

Este grupo, que se dedica a la fabricación de equipos metalúrgicos aplicados al sector del agua, comenzó su trayectoria en 1935 como un taller de aperos y maquinaria agrícola. "Ahora estamos en un mercado global en el que las áreas más importantes del mundo compiten con nosotros y ése es un gran desafío", apuntó Iglesias.

El grupo industrial Vicente Canales está formado por siete empresas divididas en dos marcas comerciales, dos distribuidores y tres de producción. Cuenta con 180 empleados repartidos entre el centro de Monzón, el ubicado en Sevilla y la filial en Portugal.