A partir de este domingo, con los horarios de verano de Renfe, el tren tardará en llegar a Valladolid ocho minutos más. Realizará paradas intermedias en todas las estaciones entre Medina del Campo y Valladolid y llegará a su destino a las 8.43 horas y no a las 8.31 como hasta ahora.

Para la plataforma el cambio puede ser "trascendental" para los viajeros habituales que utilizan este servicio por razones de trabajo o estudios y señalan que "con este nuevo horario, además de la incomodidad de las paradas intermedias y mayor tiempo de viaje, ven prácticamente imposible llegar a la hora de comienzo de su actividad".

En un comunicado recogido por Europa Press, las mismas fuentes aseguran que ya han recibido varias quejas de los usuarios en este sentido porque "gratuitamente se les perjudica sin que además nadie de la empresa ferroviaria les dé ninguna explicación".

A su juicio, supone "una vuelta de tuerca más en la estrategia de deteriorar poco a poco el servicio ferroviario y expulsar a los viajeros del ferrocarril".