Amorós realizó estas manifestaciones tras hacer balance del incremento de necesidades en emergencia social que está teniendo que asumir el Ayuntamiento con fondos propios.

Así, entre 2007 y 2009, el dinero destinado a las ayudas sociales del Ayuntamiento tuvo que incrementarse en un 164%, pero es que para este año 2010, la previsión es que suba un 40% más, con lo cual, en el presente ejercicio se destinarán 1.400.000 euros para ayudas de alimentación y ayudas a pagos de dignidad personal como son los alquileres o algunos de recibos de luz y agua.

Amorós consideró que "España está siendo una vergüenza internacional porque no sabe poner freno al descalabro económico que no sólo significa la caída de la actividad empresarial, sino que haya miles de familias que tengan que salir a la calle para pedir por su subsistencia y eso, un país del considerado primer mundo no se lo puede permitir".

La edil dijo que los vecinos de Castellón han de saber su "esfuerzo económico con el que el municipio está dando de comer a más de 4.000 familias todos los días que de otra manera no tendrían ni para pasar un día más".

En la misma línea, destacó "la importantísima labor que están realizando Caritas y otras ONG que se complementan con la acción municipal con lo cual, la realidad es mucho más grave porque si el crecimiento de las familias sin recursos continua con el mismo ritmo, habrá un momento en el que no podremos cubrir todas las necesidades".

Sólo en número de prestaciones económicas de alimentación solicitadas al Ayuntamiento hemos pasado de 1039 en 2007 a 3.885 en 2009 y este año, en los cinco meses que hemos cerrado de ejercicio ya son 1748 las solicitudes tramitadas. Esto supone un incremento casi del 200% en dos años (196%), lo cual hace "insostenible" la situación diaria de muchas familias castellonenses, recalcó.

"Ahora, estamos poniendo todos los recursos a disposición de este servicio imprescindible de emergencia, pero esta no es la solución. La solución no pasa por la caridad pasa por la dignidad de las personas y que se consiga relanzar el empleo y las familias puedan autoabastecerse. Castellón exige al gobierno que de una vez por todas deje de dar bandazos y tome acciones ejecutivas dirigidas a para el empobrecimiento de la población", concluyó Amorós.