Juan Urdániz ha adelantado que mañana se reunirá la comisión que establecerá cuáles deben ser los servicios mínimos de la huelga, que, a juicio de los sindicatos, han de ser como la plantilla "de un día festivo". Según ha apuntado, "es un punto de inflexión para determinar el éxito de la huelga".

En este sentido, ha señalado que ese día se debe "garantizar la asistencia a los pacientes, pero, además, garantizar nuestro derecho a ejercer la huelga", algo que según él se cumpliría con el personal de un día festivo, ha insistido.

Asimismo, ha precisado que la huelga va a tener "algunas molestias" para los pacientes, pero "la población tiene que entender que cuando a alguien le bajan el sueldo un cinco por ciento, sin que eso sea el eje de la movilización, tiene derecho a presionar para que esas medidas no se lleven a cabo".

Urdániz ha deseado que esas molestias sean "las mínimas", para lo que es necesario ofrecer toda la información posible a los usuarios, ha comentado. De esta forma, el representante de CC.OO. ha dicho que "vamos a pedir que haya mecanismos de cita inmediata para las personas que no van a poder ser atendidas estos días".

Ha añadido que puesto que el Servicio Aragonés de Salud (Salud) "va a mantener el calendario como un día normal, le vamos a pedir que la cita de las personas que decidan desconvocar la consulta que tenían para ese día no se aleje demasiado de esa fecha".

Urdániz ha manifestado que además de acudir a la huelga por el recorte salarial, también la convocan por la congelación de las pensiones y las afecciones del recorte a la Ley de la Dependencia, para señalar que el Plan de Ajustes fijado por el Gobierno central es "injusto y arbitrario" y "no soluciona nada".

Al respecto, ha comentado, que si bien la rebaja del sueldo de un cinco por ciento entre los funcionarios del Salud supondrá un ahorro de siete millones de euros en Teruel, tendrá un efecto negativo en el consumo puesto que los funcionarios, al ver reducido su poder adquisitivo, gastarán menos.