La Policía Local se está poniendo las pilas para disuadir a los cientos de jóvenes que cada fin de semana se concentran para hacer botellón en el campus de Tarongers.

La asociación de vecinos del barrio de San José (zona Xúquer) ya denunció hace meses que se había disparado el consumo de alcohol al aire libre en esta zona de Valencia, en especial en la parte de Ramón Llull, con las molestias en forma de suciedad y ruidos que conlleva.

Por este motivo, los agentes han incrementado los controles y, según han informado a 20 minutos desde este cuerpo, de enero a abril de este año han puesto un total de 280 sanciones, es decir, 16,4 cada fin de semana. La cuantía de las multas asciende a 300 euros.

Además, los agentes también han denunciado esta práctica en El Carmen, Juan Llorens, Alameda o calle San Vicente (junto una conocida discoteca), aunque en estos puntos la concentración de gente es menor.

En este sentido, el portavoz de la asociación de vecinos de San José, Ángel Suárez, ha asegurado que «en las últimas semanas hemos notado un incremento de patrullas policiales. Esto, unido a que los jóvenes están de exámenes, ha reducido mucho el problema. Aún así, habrá que ver qué pasa cuando terminen».

Fuentes municipales han informado que las brigadas de limpieza han recogido cada fin de semana 3,5 toneladas de residuos en Tarongers, lo que supone un gasto de 1.600 euros semanales.

Los tapones para los oídos multiplican sus ventas

Ángel Suárez, representante vecinal de San José, ha explicado que un fin de semana era imposible hasta ahora conciliar el sueño en Ramón Llull y Paseo de las Facultades. Tanto es así, que asegura que «en las farmacias se han disparado las ventas de tapones para los oídos». Suárez ha comentado que esta semana se reunirán con la Concejalía de Sanidad para determinar en qué puntos del barrio realizan mediciones sonoras.