Un botín entre 117.000 y 120.000 euros. Es la cifra de dinero que se ha llevado este jueves el atracador de una sucursal bancaria de Caixa Galicia en Guntín (Lugo), tras amordazar a dos empleados, según fuentes de la Guardia Civil.

El suceso se produjo a primera hora de la mañana, cuando el atracador, que llevaba una escopeta de cañones recortados, esperó a que abriese la oficina, a la que accedió por la parte de atrás del inmueble tras serrar los barrotes de una ventana.

En el interior de la sucursal se encontraba sólo una empleada, a la que el atracador amordazó y le aseguró que no le iba a pasar nada. Luego, también amordazó a otro trabajador al entrar en la oficina. Posteriormente, el atracador esperó a la apertura de la caja fuerte, de la que se llevó todo lo que había.

Fuentes del caso dan por hecho que tenía un "perfecto conocimiento" del funcionamiento de la sucursal fruto de un posible estudio previo. Las mismas fuentes resaltaron la importancia de la cantidad sustraída que no suele ser habitual en este tipo de robos, donde normalmente los atracadores se decantan por actuar de forma rápida y suelen conformarse con el dinero que se maneja en operaciones de ventanilla.