Las obras de construcción de la Escuela de Hostelería y Turismo de Mérida se encuentran ejecutadas al 80 por ciento y terminarán en el mes de julio, momento en el que comenzará el proceso de dotación y equipamiento y calculó que "en 2011 la escuela ya podría comenzar su andadura".

Una escuela que tendrá capacidad para formar a unos 1.000 alumnos entre los diversos niveles formativos que impartirá y que aún están por determinar. En cualquier caso, entre las especialidades en formación reglada que serán objetivo de desarrollo están tres ciclos formativos, de 'Técnico Superior en Restauración', 'Restauración' y 'Cocina y Gastronomía'.

La formación de posgrado incidirá en la gestión de empresas hosteleras, y en la elaboración y gestión en cocina. Incluirá también una cátedra de restauración y de hostelería "en la que se formarán también grandes profesionales, que también estarán formando alumnos".

Así se puso de manifiesto durante la visita que hoy realizaron a las obras la consejera de Igualdad y Empleo de la Junta de Extremadura, Pilar Lucio, y el alcalde de Mérida, Ángel Calle, acompañados de diversos técnicos del proyecto.

En declaraciones a los medios de comunicación, Pilar Lucio destacó la importancia de esta escuela, que será un Centro de Referencia Nacional para el Desarrollo de la Formación Profesional en Agroturismo, una "cuestión estratégica" para la región.

Así, destacó que esta escuela será un sitio tanto para las empresas que quieran "aportar sus novedades", como para las personas que quieran formarse "y quieran hacer itinerarios completos dentro de las posibilidades que hay en el mundo de la hostelería y de la turismo".

Proyecto ambicioso

Por tanto, Lucio resaltó que se trata de un "proyecto ambicioso para Extremadura", ya que según apuntó "va a suponer no solamente el que haya una formación exhaustiva para todas las personas que trabajan en el sector, sino también que va a ser un espacio de encuentro para las empresas del sector turístico y hotelero".

Y es que se trata de un "nuevo modelo de formación" que partirá "de las necesidades de las empresas, de las competencias y las capacidades que las empresas requieren para poder hacer programas formativos ajustados", explicó.

Al margen de la Escuela de Hostelería y Turismo, este complejo formativo incluye una residencia-hotel, para cuya construcción esta misma semana comenzaron los movimientos de tierra, y se prevé que las obras puedan concluir en marzo de 2011.

Recordó que las obras de este centro comenzaron en 2008 y han tardado algo más en realizarse por la aparición de restos romanos en los terrenos. El presupuesto es de 8 millones de euros, tanto para la escuela como para la residencia-hotel.

Gestión público privada

En estos momentos la Junta de Extremadura está diseñando el modelo de gestión de esta escuela, señaló Lucio, quien apostó por que sea "público-privado", con el objetivo de que "estén las empresas y los trabajadores participando activamente en esta escuela". En ese sentido señaló que empresas de restauración y hoteleras de "gran relevancia" ya han mostrado su disposición en participar.

La Escuela de Hostelería y Turismo albergará todas las actividades docentes, excepto algunas actividades prácticas de alojamiento que se realizarán en el edificio residencia-hotel.

Contará con una planta sótano, una planta baja y dos plantas más, y cada una de ellas tendrá aproximadamente unos 1.200 metros cuadrados de superficie.

El edificio contará con diversos tipos de aulas, como teóricas de formación; mixtas multimedia; específicas para alojamiento; de conocimiento de bebidas; de cocina demostración, o de cafetería. También contará con restaurante y cocina a la carta completos, comedor del restaurante self service, biblioteca, sala de conferencias y zonas de empresa.RESIDENCIA-HOTEL

Por su parte, la residencia-hotel albergará las instalaciones para el servicio de alojamiento, tanto a alumnos como a otro tipo de clientes, así como el servicio de lavandería y la realización de todo tipo de prácticas docentes de alojamiento.

Este edificio contará con una planta sótano, una planta baja y dos plantas, y cada una de ellas tendrá unos 664 metros cuadrados. La residencia tendrá una capacidad máxima de 100 alumnos en régimen de internado, e incluirá habitaciones dobles e individuales, recepción completa para gestionar el edificio como un hotel, varios 'office' de camareras de pisos y aula de lavandería.

En la visita que se realizó a las obras también estuvo presente el alcalde de Mérida, Ángel Calle, quien recordó que "la primera medida" que tomó como primer edil de la capital extremeña "fue desbloquear este suelo, que estaba bloqueado", y reconoció la apuesta de la Consejería de Igualdad y Empleo del Gobierno regional por este centro, "que va a convertir a Mérida en un polo turístico a nivel nacional de formación y empleo".