Según informó hoy el Ayuntamiento en un comunicado, las obras de urbanización del parque finalizaron hace unos meses, y el proceso de selección de las empresas que se implantarán en el mismo dará comienzo en este primer semestre de 2010.

El gerente del parque, Celestino Rivas, explicó que la superficie actual del recinto urbanizado es de 186.000 metros cuadrados, de los que unos 90.000 se destinarán a albergar los nuevos edificios empresariales.

Rivas recordó que la intención municipal es que las empresas que se instalen en el parque deben estar directamente relacionadas con el sector agroindustrial o agroalimentario y deben contar "con gran capacidad para mejorar en competitividad a través de la innovación, la calidad y el I+D+I".

En este sentido, detalló que el parque contará con tres zonas diferenciadas, una de gran industria, destinada a empresas con importantes procesos productivos como las hortofrutícolas o de cuarta gama; una zona de mediana industria, para empresas del sector productivo, como las dedicadas a los envases o el embalaje; y una última zona de pequeña industria, para empresas de carácter tecnológico.

Asimismo, el gerente recordó que los responsables del parque están manteniendo contactos con la Universidad de Málaga (UMA) con el fin de establecer acuerdos de colaboración "que permitan a los investigadores universitarios relacionarse con las empresas implantadas en el parque y viceversa".

Por su parte, la alcaldesa de Vélez-Málaga, María Salomé Arroyo (PSOE), que visitó hoy el recinto junto con buena parte de la corporación, expresó su satisfacción por la culminación de las obras y por la puesta en marcha de un proyecto "de gran importancia y que creará nuevos puestos de trabajo en la comarca".

El Parque Tecnoalimentario, cuya urbanización ha tenido un coste de 20 millones de euros, tiene capacidad para albergar 39 empresas del sector agroalimentario y está situado en el núcleo de El Trapiche, entre el aeródromo Leoni Benabú, la carretera de acceso a Benamargosa y la carretera A-356.