En su intervención ante la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado, a la que se incorporó ya mediada la mañana, Areces recordó que las comunidades autónomas propusieron a sus candidatos para formar parte del alto tribunal y el proceso sin embargo está "encallado", por lo que reconoció como normal que desde los gobiernos autonómicos se manifieste "inquietud" por esta situación.

Por ello, calificó como "conveniente" la petición del presidente de la Generalitat, José Montilla, de convocar este órgano para debatir sobre el asunto. "El problema existe y no se debe minusvalorar su repercusión", advirtió antes de reconocer que esta prórroga es "una anomalía en toda regla que supone una contradicción a lo dispuesto en la Constitución".

Areces enfatizó en este punto que es necesaria una "profunda reflexión" y realizó un "llamamiento a la responsabilidad" porque, a su juicio, esta "disfunción debe ser corregida con celeridad, altura de miras y decisión" por parte del Senado, los grupos parlamentarios y los partidos que los sustentan.

El presidente del Principado reclamó así que "culmine sin más dilaciones" la renovación del TC, aunque aseguró que esta postura no debe empañar el papel jugado por el alto tribunal a lo largo de los últimos años para "fortalecer el sistema de derechos y libertades, mejorar la configuración democrática de las instituciones y posibilitar un favorable desarrollo de autogobierno y respeto a los ámbitos competenciales de las comunidades".

Petición de máxima diligencia al tc

Areces insistió así en la necesidad de seguir apoyando esta "positiva trayectoria" del Tribunal Constitucional, al que quiso reconocer su "plena legitimidad" para seguir cumpliendo con sus cometidos.

A la vez, exigió al TC la "máxima diligencia" en la resolución asuntos que tiene pendientes y recordó que su correcto funcionamiento es una de las "condiciones necesarias para el armónico funcionamiento de los poderes públicos".