Al respecto, precisó que existen diferentes posibilidades para abordar esta cuestión, motivo por el cual se evaluará cuál es la forma "más adecuada" de desarrollar la iniciativa.

En este sentido, explicó que el objetivo de aplicar la tasa sería disuasorio y no recaudatorio, porque algunos de los rescates que se producen podrían "pecar", en cierta medida, de actuaciones "imprudentes".

Luis Aznar realizó estas declaraciones en Riaño, donde se celebraron las VI jornadas técnicas de coordinación de emergencias en los Picos de Europa, un acto en el que estuvo acompañado por el director general de Interior y Seguridad del Principado de Asturias, Valentín Ruiz García y que finalmente no contó con la presencia del director general de Protección Civil de Cantabria, José Luis Gochicoa González.

Por su parte, Valentín Ruiz manifestó que Cantabria aplica el cobro de tasas en rescates en determinadas circunstancias y, en Asturias, se articula esta cuestión en los Presupuestos para 2010, algo que se sustenta en la "preocupación" de las autoridades, que decidieron establecer un cobro "educativo más que recaudatorio".

Concretamente, en Asturias hay tres supuestos "claros y nítidos" por los que podría cobrarse la tasa en servicios de rescate: cuando alguna persona no asume los avisos del 112 y a pesar de ello se adentra en circunstancias que propician un accidente, cuando se adentra en zonas señaladas como peligrosas o restringidas y cuando se realizan actividades sin la debida indumentaria o equipamiento.

No obstante, precisó que en lo que va de año, todavía no se ha producido ningún caso en el que haya habido que aplicar dicha tasa, cuya cuantía varía entre 32 y 2.400 euros, en función de los medios empleados para el rescate.