De este modo, en nota de prensa, el sindicato señaló que el pasado viernes 7 de mayo, presentó denuncia por infracción de las normas laborales, por no haber entregado la empresa la documentación solicitada y legalmente exigible y por presunta mala fe por parte empresarial en el procedimiento del ERE. Así trata de que la administración exija "garantías reales" a este proceso de expediente, "ante el nulo interés por negociar de la empresa".

De hecho, indicó que la denuncia se realiza ante el "inmovilismo empresarial", dado que la empresa y sus asesores "se limitan a asistir y convocar reuniones semanales para justificar los contactos con la representación sindical, pero sin entregar documentación, y sin disposición real ni a la negociación ni a la salvaguarda de los puestos de trabajo".

Igualmente, explicó que también ha presentado denuncia ante la Inspección de Trabajo por desplazamiento de trabajadores de otros centros y por suplantación de identidad, así como el desvío de mercancías, habiendo tenido que establecer retenes para vigilar la actividad del centro los fines de semana.

"A la indefensión que denuncia la representación sindical se suma lo acontecido en las últimas reuniones, el 10 y el 17 de mayo, en las que la empresa, aparte de persistir en su inmovilismo en el proceso, ha explicitado su intención de terminar con las reuniones el próximo día 24 de mayo y dar por concluido el periodo de consultas", afirmó.

Al tiempo, según el sindicato, ha incumplido el compromiso, que consta en acta, de mantener reuniones a lo largo de esta semana para desbloquear la situación. "Para la representación legal de los trabajadores, la negociación no se puede dar por iniciada ni real ni legalmente, por la postura empresarial", agregó.

Por ello, consideró "indignante" la irracionalidad de la postura empresarial, "que impide analizar realmente la situación del centro de trabajo de Tarancón para poder proponer y acordar medidas para garantizar su viabilidad futura", agregó.

"Indignación que comparte el colectivo de trabajadores y trabajadoras, lo que hace inevitable el planteamiento de movilizaciones y concentraciones para el próximo mes de junio, salvo que exista un cambio de actitud y asunción de responsabilidad por parte empresarial", argumentó.

De igual modo, dijo que al menos debe garantizarse un adecuado proceso de consulta y negociación, con arreglo a lo estipulado en la Ley, que permitiera un acuerdo ante la real situación empresarial y del centro de trabajo, "muy distinta a la pretendida en el expediente de regulación".