Fuentes policiales informaron a Europa Press de que el individuo, que habría apuñalado mortalmente a su ex pareja, de unos 50 años, en la esquina en la que la avenida Sor Francisca Dorotea confluye con la de San Lázaro, pasará mañana a disposición del juzgado en el que finalmente recaigan las diligencias.

El crimen fue perpetrado el lunes en torno a las 21,36 horas y, mientras la víctima ha sido incinerada hoy en el cementerio de San Fernando, sobre el supuesto autor de los hechos no pesaba orden de alejamiento o medida cautelar ninguna por lo que a la víctima se refiere.

Del suceso se tuvieron las primeras noticias cuando los servicios de emergencias 112 de la capital hispalense recibieron una llamada a las 21,36 horas en la que se notificaba una agresión por arma blanca. Al lugar acudieron efectivos de los servicios de emergencias, del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local de Sevilla, que no pudieron sino certificar el fallecimiento. A los pocos minutos, no obstante, fue arrestado este individuo.

Las primeras declaraciones de testigos y vecinos confirmaban lo problemático de la relación entre difunta y presunto agresor. Así, Manuela Viñuela, una vecina del barrio, explicó a Europa Press Televisión que el detenido había sido la pareja de la fallecida "durante tres años". Según explicó, él "estaba siempre borracho" y no hacía más que pedirle dinero constantemente hasta que ella se hartó y "decidió dejarlo".

"últimamente la esperaba mucho por el barrio"

En este sentido, Viñuela contó que "últimamente él la esperaba mucho por el barrio para pedirle dinero". "Yo estuve hablando con ella sólo diez minutos antes de que la matara, fue un visto y no visto", se lamentó.

Otro vecino que reside cerca del lugar del suceso y que fue testigo de los hechos, Johnny Blanco, explicó a Europa Press Televisión que ayer, a última hora de la tarde, paseaba con su hijo cuando de pronto vio a una pareja en actitud extraña. "Pensaba que se estaban abrazando o que estarían jugando, pero no, en ese momento lo que la estaba era apuñalando", indicó.HIPÓTESIS

Este testigo añadió que cuando se percató de lo que estaba ocurriendo, el hombre se fue "corriendo del lugar" mientras la víctima pedía "ayuda". "Se cayó al suelo y al instante estaba toda rodeada de sangre; un hombre y una mujer intentaron taponar las heridas pero se acabó la sangre y se murió", recordó.

Al parecer, y según la versión vecinal, la fallecida, que vivía en la cercana zona de La Barzola, se dedicaba a la peluquería y había mantenido una relación sentimental con su agresor; los padres y la hermana de la víctima vivían en la barriada anexa de El Cerezo y poseen un piso que la fallecida estaba arreglando.

Habría sido en un restaurante de comida rápida ubicado en el cruce de la avenida de San Lázaro con Sor Francisca Dorotea, muy cercano a la vivienda de la fallecida, cuando empezó la discusión al pedirle él dinero a ella. Al abandonar el lugar y cruzar la misma acera, ésta fue apuñalada a la altura de la Plaza del Ajolí, tras lo cual el agresor intentó escapar, siendo poco después detenido.