El Ayuntamiento de León pone en funcionamiento un nuevo semáforo con sistema 'foto-rojo' en Alcalde Miguel Castaño

El Ayuntamiento de León ha activado un nuevo semáforo con sistema 'foto-rojo' en la calle Alcalde Miguel Castaño, que se suma al instalado en junio de 2009 en la avenida de Europa, junto a la fuente de Santa Ana.

Con esta medida se persigue mejorar las condiciones seguridad vial mediante la reducción de los riegos de colisiones y atropellos en las vías principales de la ciudad, según informó el Ayuntamiento de León en una nota recogida por Europa Press.

El concejal del área, José Antonio Díez, recordó que estos dispositivos se encuentran instalados ya en otras ciudades y apuntó que en todos los casos se obtienen mejoras "muy significativas" en cuanto a la reducción de la siniestralidad.

En el caso de León, subrayó que el 'foto-rojo' existente actúa desde su instalación de manera "preventiva y disuasoria", ya que cada vez son más los conductores que respetan la señalización semafórica. "Los ciudadanos son cada vez más conscientes de que respetar la señalización y adecuar la velocidad es la mejor manera de prevenir los accidentes de tráfico", destacó.

Finalmente, señaló que estos dispositivos, en virtud de los resultados obtenidos, podrán tener nuevas ubicaciones en un futuro en vías de la ciudad en las que los datos de siniestralidad "así lo aconsejen".

Sensor láser y cámara digital

El sistema 'foto-rojo' se materializa en un dispositivo dotado con sensor láser y cámara digital que permite detectar y capturar automáticamente las infracciones cometidas por aquellos conductores que no respetan el semáforo en rojo.

El dispositivo detecta automáticamente los vehículos que se lo saltan en rojo con el objetivo de mejorar las condiciones de seguridad vial, ya que un buen porcentaje de los accidentes ocurridos en las ciudades se derivan de no respetar los semáforos.

El sistema emplea un sensor láser y una cámara digital por cada carril de tráfico de la intersección, por lo que permite la captura de las infracciones con una gran precisión sobre la posición y la velocidad de cada vehículo bajo cualquier condición de tráfico.

Las imágenes capturadas son recogidas por la Policía Local y, a partir de ese momento, se efectúan las denuncias correspondientes, cuyas sanciones son de 150 euros y suponen la retirada de cuatro puntos del carné de conducir.

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