El Comité Ejecutivo de la Confederación de Empresarios de Aragón (CREA) afirmó hoy que el sector privado de la economía está "sufriendo" el proceso de ajuste desde 2008, lo que ha conllevado el cierre de empresas y el aumento del desempleo.

En una nota, la CREA refrenda la postura mantenida ayer, jueves 13 de mayo, por el presidente de la patronal aragonesa, Jesús Morte, tras su reunión con los sindicatos mayoritarios y el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias.

Hoy la Ejecutiva de CREA insistió en que las medidas de recorte del gasto público anunciadas por el presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, son "necesarias" y "están bien encaminadas", pero la reducción del déficit público debería haberse abordado "antes" y no tras la intervención de la Unión Europea (UE).

Igualmente, el Comité Ejecutivo de CREA señala que "estas medidas no son suficientes para atajar los problemas de la economía española, que requieren reformas económicas estructurales y urgentes encaminadas a incrementar la competitividad y la productividad, así como a reducir el grave problema del desempleo que sufre nuestro país".

Por ello, continúan siendo "imprescindibles" otras reformas "largamente demandadas por los empresarios en el mercado laboral, el sistema de pensiones y el ámbito fiscal, así como mejorar el acceso de las empresas — especialmente de las pymes— a la financiación".

Respecto al recorte de la inversión pública estatal, "y aún entendiendo la necesaria austeridad", el Comité Ejecutivo de la Confederación "considera básico que el Gobierno sea muy equilibrado en este capítulo, puesto que va a tener un impacto negativo directo sobre el empleo".

Además, las infraestructuras públicas que dependen de estas inversiones "son condición necesaria tanto para que nuestro país pueda incrementar su competitividad como para garantizar la cohesión y vertebración territorial".

La CREA manifiesta su preocupación por "la falta de concreción territorial del recorte de inversiones, ya que las infraestructuras son especialmente vitales en territorios como Aragón, muy extenso y despoblado, y donde quedan por realizar infraestructuras prioritarias", como la Travesía Central, la finalización de la autovía Pamplona-Huesca-Lérida, la integración de Teruel en la alta velocidad ferroviaria, el desdoblamiento de la N-232 y la N-II y las obras del Pacto del Agua.