En una rueda de prensa, el primer edil, acompañado por los concejales de Cultura, Denis Itxaso, de Obras y Proyectos, Duñike Agirrezabalaga, y los arquitectos Fuensanta Nieto y Enrique Sobejano, presentaron hoy el material que cubrirá la fachada del nuevo edificio anexo al Museo, sobre el que ya se ha comenzado a colocar la "piel de aluminio fundido" que acogerá el muro vegetal.

Los creadores de este novedoso recubrimiento indicaron que la fachada del inmueble se ha concebido como una "colaboración entre arquitectura y artes plásticas en una inusual intervención integrada en la ciudad", una idea que partió de los arquitectos ganadores del concurso convocado por el Ayuntamiento para la rehabilitación y ampliación de San Telmo.

En la actualidad, los trabajos de construcción de la nueva estructura museística consisten en colocar estas planchas de aluminio con perforaciones de 1,8 metros de largo y 0,6 de ancho, de las que brotará el manto vegetal "en un diálogo que relaciona al conjunto con el Monte Urgull, sin que ninguno de los dos órdenes -vegetal y material- predomine sobre el otro", explicaron.

Tanto los arquitectos Fuensanta Nieto y Enrique Sobejano, como los artistas Leopoldo Ferrán y Agustina Otero, se fijaron en las rocas horadadas por el agua y el viento, de las que surgen musgos y líquenes, para concebir esta fachada vegetal, a la que se ha incorporado un sistema de control numérico.

Según explicaron sus autores, el proyecto combina los paneles con diferentes grados de perforaciones destinados a albergar las plantas, con otros paneles vacíos que se aprovecharán para colocar un sistema de iluminación nocturna del conjunto.