En un comunicado, el comité de empresa informó de que la semana pasada el representante legal de la empresa comunicó a los representantes de los trabajadores la necesidad de nuevas inversiones y, consecuentemente, la necesidad de buscar nuevos inversores.

Según la información que tiene el comité de empresa, existen inversores que pueden continuar y ampliar la actividad de la empresa, pero ven que hay dudas por parte de la propiedad en cuanto a los objetivos y fines a conseguir. Además, sitúan la responsabilidad de la situación actual de la empresa "en el anterior gerente por su negativa gestión y en la propiedad por su falta de control y supervisión".

No obstante, los trabajadores desconvocaron el encierro que mantenían en las instalaciones al considerar que existe un acercamiento entre la propiedad de la empresa y el inversor y un compromiso a trabajar conjuntamente en dar viabilidad a la compañía en el día a día.

Los trabajadores aseguran que seguirán garantizando la producción y atendiendo los compromisos que la empresa tiene adquiridos "actuando con plena responsabilidad y tratar de impedir que por motivos de gestión se pierdan 215 puestos de trabajo en Córdoba".

Por ello, piden que las administraciones públicas medien e intervengan en la solución y viabilidad de la empresa. En la actualidad existe un auto del Juzgado número 3 de Posadas, que bloquea cautelarmente las cuentas de la empresa, como responsable civil subsidiario de otra empresa que tiene acreedores.

Ese bloque es el que ha impedido que los trabajadores cobren el mes de abril y puede dificultar el desarrollo de la actividad empresarial inmediata de la empresa.