Barreda, que se manifestó así en la clausura de las jornadas 'Vivienda protegida frente a la crisis', que organiza CCOO en colaboración con VITRA, conjunto de cooperativas de viviendas impulsada por CCOO, y

Gps gestión, avanzó su intención de "llegar al nivel de las cuadrillas de albañiles" para informarles del Plan.

El objetivo es "hacer un esfuerzo extraordinario en un momento en el que se necesita", con la intencionalidad de "agitar el panorama", de tal forma que, ante ese Plan de Vivienda, no se responda "de manera burocrática" sino con "un esfuerzo colectivo para aprovechar al máximo esa posibilidad" de recursos que ofrece el Ministerio a Castilla-La Mancha.

En este contexto, el responsable autonómico también habló del V Plan Regional de Vivienda 2009-2012, que cuenta con un apoyo financiero de 650 millones de euros —un 55 por ciento más que el IV Plan de Vivienda— de los que 272 son aportados por la Junta y el resto por el Ministerio, y de sus "objetivos sociales compartidos", entre los que citó los de empleo, "que también son muy importantes".

José María Barreda también se refirió a un sector, el de la construcción, en el que no hay que buscar "una demonización" sino un "esfuerzo" de todos, ya que "es imposible la sustitución de una actividad que genera tantos puestos de trabajo directos o indirectos", pero en la que es necesario apostar por la formación.

El presidente de Castilla-La Mancha se mostró convencido de que, siendo el acceso a una vivienda un derecho constitucional, los derechos de los ciudadanos están relacionados con los impuestos y el hecho de que el Estado tenga recursos suficientes para garantizarlos.

Discurso contradictorio

Por ello, vio "aconsejable", cuando se asiste a determinados "discursos contradictorios por parte de partidos políticos que se llenan la boca de exigir, al tiempo que piden que hay que rebajar los impuestos", poner de manifiesto "las consecuencias que tienen unas prácticas y otras".

No obstante, reseñó cómo en Castilla-La Mancha hay un "esfuerzo permanente de pacto" y de "búsqueda de consenso" con toda la sociedad también en este ámbito, dentro del planteamiento de "no gobernar solos", aunque subrayó que ese "permanentemente tender la mano" es "compatible con que cada una de estas organizaciones mantengan su autonomía y el trabajo que le es específico".

Finalmente, Barreda reconoció que "el momento no es fácil", pero advirtió de que la situación actual "lejos de amilanarnos, lo que tiene que hacer es impulsarnos a hacer un esfuerzo mayor en todos los órdenes", y por eso insistió en el compromiso del Gobierno que preside para realizar ese esfuerzo, ayudado por "miradas críticas, complicidades críticas y ayudas exigentes" como las que espera y desea por parte de CCOO.