Una patrulla que circulaba por la C-66 detectó un vehículo que circulaba a una velocidad anormalmente reducida y ordenó que se parara, observando que el conductor podía estar condicionado por los efectos del alcohol, según publica hoy 'Diari de Girona'.
El alcalde marcó 0,74 miligramos de alcohol por litro de aire expirado, una tasa que supone el triple de la permitida, y quedó imputado a la espera de ser citado ante el juez.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios