El servicio eléctrico en la provincia de Girona está totalmente normalizado, según informa la compañía Endesa, después de los apagones que se produjeron el martes en diversas poblaciones a causa del temporal de nieve, viento y lluvia y que afectaron a miles de abonados.

El fluido llega actualmente a todos los clientes de la zona, aunque en algunos municipios se utilizan grupos electrógenos para abastecer a las viviendas más alejadas de los núcleos urbanos. Los cortes de luz, en todo caso, han hecho revivir el malestar de ciudadanos, empresas y administraciones por el apagón sufrido tras el temporal de nieve del pasado 8 de marzo y que, en algunos casos, mantuvo a vecinos sin suministro durante una semana.

Así, la Federación de Hostelería de las Comarcas de Girona ha denunciado a través de un comunicado lo que entiende como un "menosprecio" de Endesa hacia el sector turístico en la zona y acusa a la compañía de "reírse" del sector y de "incapacidad para resolver de una vez por todas el mal estado de las infraestructuras". "Estamos cansados de tener que sufrir porque a la más mínima incidencia meteorológica nos quedamos sin luz", asegura el comunicado.

Mientras, Endesa ha anunciado que abonará entre sesenta y ochenta euros día por el apagón del pasado marzo a los clientes residenciales afectados. La Generalitat ha desactivado la alerta por nieve y viento y ha rebajado el aviso por lluvia al estado de prealerta, tras tres días de un activo temporal más propio de invierno que de plena primavera.