Medio centenar de personas protestó hoy en el centro de la capital abulense contra el despido de la mitad de la plantilla de la empresa de montajes eléctricos Espí, que quiere deshacerse de 20 de los 40 empleados, la mayoría de entre 50 y 60 años.
Según informaron a Europa Press fuentes sindicales, la protesta provocó el corte al tráfico de alguna calle céntrica.
Asimismo, indicaron que casi todos los trabajadores han prestado sus servicios durante más de 30 años en la empresa y destacaron la dificultad que tendrán para conseguir un nuevo empleo, a la vez que exigieron que se presenten un expediente de suspensión de empleo y no de extinción de contratos.
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