El temporal de lluvia, viento y nieve que azota Cataluña ha dejado a primera hora de la mañana del martes sin luz a unos 10.000 abonados de la comarca gerundense del Baix Empordà, aunque pasadas una veces subsanadas las primeras consecuencias sólo 1.800 de ellos seguían sin suministro y la previsión es que éste se recupere con la mayor prontitud que sea posible.

Así lo ha afirmado en rueda de prensa el director de Protección Civil, Josep Ramon Mora, que ha destacado la rápida respuesta de la compañía Fecsa-Endesa para restablecer la normalidad en las zonas afectadas, que ya sufrieron cortes de luz de hasta diez días a raíz de la histórica nevada de marzo pasado.

En concreto, a primera hora de la mañana del martes el corte en el suministro eléctrico afectaba a unos 10.000 abonados en el Baix Empordà, si bien a media mañana ya eran unos 5.000 abonados y hacia las 13.00 horas tan sólo quedaban sin luz 1.800 abonados de Santa Cristina d'Aro, Sant Feliu de Guíxols, Pals, Torroella de Montgrí, Colera, Palafrugell y Figueres.

Aunque Fecsa-Endesa no ha concretado al departamento de Interior cuándo se prevé restablecer el servicio, Mora ha vaticinado que lo más probable es que en "pocas horas" se pueda recuperar y que en la misma tarde del martes se haya vuelto a la normalidad.

Mora ha señalado que este temporal de lluvia persistente, viento y nieve no ha provocado mayores incidencias, por lo que ha indicado que Cataluña se encuentra en una "situación de normalidad invernal, aunque en el mes de mayo".

En cualquier caso, se mantiene activada la alerta del plan Inuncat, más por el desembalse de los pantanos de Rialb, Sau, Flix y Foix que por la lluvia, así como las alertas por nieve y viento, que pueden provocar afectaciones hasta mañana al mediodía, especialmente en el Empordà.

El temporal de viento y lluvia también ha provocado problemas en Renfe, en el tramo entre Figueres y Portbou, que se ha cubierto por carretera.