Vázquez (PSdeG) promete "trabajar a tope" por un acuerdo entre las cajas y pide volver a llevar la ley al Parlamento

Avisa a Caballero de que el "discurso" lo marca él y pide que la Xunta no plantee una propuesta de reparto mientras negocian las cajas
Feijóo Y Vázquez Aproximan Posturas Sobre Las Cajas
Feijóo Y Vázquez Aproximan Posturas Sobre Las Cajas
XUNTA
Feijóo Y Vázquez Aproximan Posturas Sobre Las Cajas

El secretario xeral del PSdeG, Manuel 'Pachi' Vázquez, se comprometió hoy a "trabajar a tope" para generar "entre todos" un escenario "de confluencia" entre las cajas, ahora que están en el tramo "teóricamente final" para alcanzar un acuerdo que dé como resultado una fusión de Caixa Galicia y Caixanova. "Yo me pongo a eso", garantizó, tras reclamar que la Ley de Cajas de Galicia vuelva al Parlamento gallego para ser reformada.

Tras esto, no ocultó que "pasaron muchas cosas" desde la reunión entre los dos líderes de la oposición con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a finales de noviembre para abordar la fusión, y cuyo consenso, según indicó ayer Vázquez "duró cinco minutos". No obstante, se mostró dispuesto a "mirar para adelante" con el objetivo de trabajar "todos juntos" en el momento de "la escapada buena", tal y como se refirió "en términos ciclistas" a una semana que puede ser clave para el futuro del sistema financiero gallego.

Ahora, según explicó tras una reunión de casi dos horas con el máximo mandatario autonómico, se debe abrir un "espacio común" en el que estén representadas "todas" las fuerzas políticas y los propios dirigentes de las entidades. "Ponemos una barrera sobre el pasado y trabajamos todos mirando hacia adelante para que, si es posible una fusión, salga", reivindicó, tras recordar que "el pasado", que "nadie puede pretender que no exista", es "una batalla dura con ataques legislativos" contra el Sur de Galicia.

A pesar de todo, se mostró partidario de echar "agua helada" para "sosegar" el debate. "Si alguien quiere ganar cinco a cero, no hay partido", reflexionó el dirigente socialista, quien detectó "divergencias" principalmente en torno a los elementos de gobernanza, y apostó por "trabajar para pulirlas" y "favorecer un gran acuerdo" que derive en "una caja equilibrada social y territorialmente y querida por todos los gallegos".

"Que nadie haga de esto una cuestión de honor y nadie ponga precio a la cabeza de nadie", demandó Vázquez, quien rechazó "la confrontación, los insultos y las amenazas" toda vez que "ya sobraron puntos de desencuentro". "Y las fusiones las hacen las cajas, nadie las puede forzar", incidió, tras mostrarse de partidario de andar por el camino de la búsqueda de "puntos de encuentro" que faciliten el "acoplamiento" de ambas entidades de ahorro. Dicho esto, concluyó que "será más fácil aterrizar si no se llena todo de baches".

Posibilitar acuerdos

En cuanto a la nueva etapa de consenso entre las formaciones políticas y el Gobierno gallego para lograr una fusión de Caixa Galicia y Caixanova, Vázquez opinó que será más fácil "su confluencia" una vez que estas entidades "perciban" el "abandono de la imposición" que incluso posibilita acuerdos políticos.

"Quedan obstáculos en las negociaciones que aún se ven como de imposible solución, pero los rebatiremos o minoraremos para convertirlos en posibles", arengó, tras admitir la dificultad de cerrar fusiones entre cajas que han sido competencia durante largo tiempo y que ahora deben encontrar puntos de acuerdo. Como prueba, señaló que "hay 20 intentos en España" y que todos presentan "fricciones".

Cuestionado sobre la idoneidad de que el presidente de la Xunta formule una propuesta sobre el reparto de sedes y puestos ejecutivos en la caja resultante, tal y como planteó el BNG, el dirigente del PSdeG opinó que sería "una intromisión" hacerlo mientras las dos entidades negocian. No obstante, no descartó esta vía en caso de que "no alcancen un punto de equilibrio".

Ley de cajas

El responsable de los socialistas gallegos mostró su coincidencia con la postura de Caixanova al demandar que la Ley de Cajas de Galicia se "vuelva a llevar" al Parlamento para reformarla "entre todos" —en diciembre de 2009 fue aprobada con los votos de PP y BNG—, ya que, a su entender, esto "ayudaría a derribar suspicacias".

De hecho, interpretó que la normativa fue redactada con el objetivo de forzar la fusión y a la vista de que ésta será "aparcada" por los acuerdos a los que lleguen las dos cajas, pidió "no ser cortoplacistas" y diseñar una ley que defina "el futuro del sistema financiero".

Tras esto, indicó que la Ley de Órganos Rectores de Cajas de Ahorro (Lorca) será aprobada por el Congreso de los Diputados en el segundo semestre de este año y, dado que la norma autonómica tendrá que revisarse "sí o sí", volvió a pedir "un esfuerzo" para reformarla con "consenso" y que deje de suponer "confrontación con Madrid".

Posición de caballero

Preguntado si el alcalde de Vigo, el también socialista Abel Caballero, respaldará su actitud de consenso en aras de lograr una fusión, Vázquez aseguró que el vigués "no será un obstáculo" dado que los regidores "no son los que hacen las fusiones". Además, consideró "normal" y "legítima" la posición del primer edil "en defensa del statu quo de su ciudad".

De cualquier modo, dejó claro que su postura "ahora queda en segundo plano", puesto que Caballero pertenece a un partido que "tiene un discurso" sobre la fusión de las cajas y que éste es el que transmite su secretario xeral.

Reunión con feijóo

Finalmente, sobre la reunión que mantuvo con Feijóo y en la que pidió explícitamente que no hubiese "más interlocutores", explicó que su "condición" partió de una propuesta inicial del presidente de la Xunta en ese sentido. "Es más razonable mantener reuniones bilaterales que conjuntas", esgrimió, tras argumentar que las tres fuerzas con representación parlamentaria en Galicia no tienen "una visión homogénea y uniforme".

Así las cosas, entendió que es "más operativo y concreto" que los dos líderes de los partidos de la oposición se reúnan con el presidente gallego, que "representa a todos". Además, sostuvo que sus reuniones con el líder del Ejecutivo autonómico versan sobre "cosas institucionales" que prefiere "que sean con el presidente que con un partido político".

Por último, rechazó tratar de ejercer como "interlocutor" y enmarcó las reuniones que mantendrá con las cúpulas de las dos cajas gallegas a lo largo de esta semana en su intención de "hacer lo posible por resolver o minorar" los "puntos de litigio" entre Caixa Galicia y Caixanova.

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