"Abrimos las puertas a la economía, a poder traer inversiones a Galicia y también de que las empresas gallegas se internacionalicen", proclamó el máximo mandatario autonómico, quien recordó que tuvo la oportunidad de participar en una comida en la que participaron 160 empresarios gallegos afincados en México.

En este escenario, apostó por un cambio en la percepción de la diáspora y su interpretación no sólo como "un hecho cultural" o como "derechos sociales", sino como "una oportunidad económica" para Galicia. Con todo, aludió a la presentación de la tarjeta sanitaria y ratificó su apuesta por la "equiparación de derechos" de los emigrantes.

"La equiparación en el voto de los emigrantes a los residentes en Galicia, que el voto sea rogado y que intentemos transparentar el voto a través de la urna, no significa, en ningún caso, que abandonemos los derechos sociales", remarcó Feijóo, quien avanzó que "seguirá insistiendo" en lograr que tengan los mismos derechos que los residentes en la comunidad "porque son gallegos".

En el apartado de encuentros institucionales, recordó que en su viaje tuvo la oportunidad de entrevistarse con el ministro de Economía de México, Gerardo Ruiz, con su homólogo de Agricultura y Pesca, Francisco Javier Mayorga, y con el subsecretario de Energía, Benjamín Contreras.

Por último, se encontró con el jefe de Gobierno de la ciudad de México D.F., Marcelo Ebrard, en una reunión en la que acordaron desarrollar y protocolizar el acuerdo de "hermanamiento" entre México D.F. y Galicia para ver qué posibilidades tiene la comunidad en esta ciudad de 24 millones de habitantes.