La consejera de Educación y Ciencia, visitó hoy uno de estos centros, el IES Azarquiel de Toledo, donde los alumnos y alumnas de Primero de la ESO han comenzado a dar sus clases con contenidos digitales después de las vacaciones de Semana Santa, informó la Junta en nota de prensa.

La consejera, que pudo constatar el buen funcionamiento de esta experiencia, señaló que se trata de un ejemplo más de que Castilla-La Mancha va un paso por delante en la implantación de las TIC, como ya ocurriera con el reparto de portátiles a los profesores o el programa Escuela 2.0, que ha completado este curso antes que ninguna otra Comunidad.

La titular de Educación y Ciencia resaltó que se trata de seguir estudiando lo básico pero con una herramienta del futuro. "No podemos tener una escuela del siglo XIX en el siglo XXI. La escuela se tiene que incorporar a su tiempo porque si no, no dará la respuesta que demanda el sistema educativo y, además, está comprobado que el uso de las TIC desde edades tempranas produce beneficios en el mercado de trabajo".

García recordó que el próximo curso el programa 2.0 se extenderá a Quinto y Sexto de Primaria y en el curso 2011-2012 llegará a Primero de Educación Secundaria, "por lo que esta exploración con libros digitales nos va a ser de gran utilidad de cara a la llegada de 2.0 a los IES".

"En Castilla-La Mancha estamos convencidos de que las nuevas tecnologías van a ser el futuro, que nuestras aulas del siglo XXI serán virtuales". "Se está produciendo un gran cambio en las formas de aprender y enseñar pero queremos hacerlo con cautela y de ahí estos programas que nos sirven para explorar las bondades o los posibles aspectos negativos", dijo

Por el momento, y según confirmó Luis Corrales, profesor del IES Azarquiel, los contenidos digitales están teniendo un gran éxito. "Nuestros alumnos utilizan habitualmente Internet, y la escuela no puede quedarse atrás", aseguró. "Lo cierto que es que esta nueva herramienta motiva, aumenta el interés de los alumnos, y sirve para que mejoren su rendimiento y amplíen la visión de futuro de lo que es la escuela", precisó.

Modelos de prueba

La prueba con libros digitales se está desarrollando, además de en el IES Azarquiel, en los IES Don Bosco de Albacete; Estados del Duque de Malagón (Ciudad Real); Santiago Grisolía de Cuenca; y Profesor Domínguez Ortiz, de Azuqueca de Henares (Guadalajara), y tiene dos versiones: la inmersión total en Tecnologías de Aprendizaje Colaborativo (TAC), y el modelo mixto.

En el primer caso, los contenidos están en formato digital a través de los libros digitales. Tanto los alumnos como el profesorado disponen de un usuario y contraseña que les da acceso a las diferentes asignaturas, contenidos, ejercicios, o guías didácticas (profesorado), que hay disponibles en estos libros digitales.

Además, cada alumno dispone de un ordenador miniportátil (Netbook) que utiliza en clase de forma personal. Con este dispositivo puede acceder a los libros digitales a través de la red Wi-Fi del centro y desde su casa a través de la conexión particular que tenga. El profesor cuenta con el ordenador portátil y con una Pizarra Digital Interactiva en el aula para poder realizar las explicaciones oportunas en este dispositivo.

En cuanto al modelo mixto, la diferencia radica en que en este, los alumnos no disponen de ordenadores Netbook para uso en clase. La dotación informática se centra en la Pizarra Digital Interactiva, el ordenador del profesor y la red Wi-Fi del Centro.

De esta forma, el profesor utiliza los libros digitales como medio de exposición didáctica en clase a través de la PDI, mientras que los alumnos utilizan los medios habituales como el libro de texto y el cuaderno de trabajo.

Al mismo tiempo, los alumnos también pueden hacer uso de los libros digitales a través de los medios informáticos con los que cuenta ya el centro, como las aulas Althia y portátiles del Plan de Conectividad Integral o a través de sus propias herramientas informáticas personales y particulares que tenga en su casa.

Para el desarrollo del programa la Consejería cuenta con la colaboración de tres empresas especializadas en el sector, que aportarán de forma gratuita sus productos: Digital-Text, que aporta los libros digitales con todos los contenidos educativos en este formato, accesibles para los alumnos y para el profesorado; Toshiba, que aporta ordenadores miniportátiles para los alumnos que participan en el estudio; y SMART, que aporta Pizarras Digitales Interactivas para instalarlas en las clases del estudio.