Poco antes de las nueve de la mañana de ayer, jueves, un particular alertó a la Policía Vasca de que un hombre estaba golpeando los vehículos que se encontraban estacionados en la zona de Bilbao La Vieja.

Ante tal alerta, una patrulla de seguridad ciudadana acudió al lugar señalado, donde comprobó que efectivamente algunos turismos allí aparcados presentaban abolladuras y tenían los espejos retrovisores rotos.

Unos testigos de lo ocurrido indicaron a los ertzainas que el causante de tales destrozos era un individuo que permanecía en la zona. Los agentes identificaron al sospechoso y, tras realizar las necesarias comprobaciones, se percataron de que se trataba de un conocido delincuente habitual. Finalmente, éste fue detenido y acto seguido trasladado a dependencias policiales.