Un total de 24.318 trabajadores en Euskadi son empleadas de hogar, pero sólo 14.553 están afiliadas en el Régimen especial de la Seguridad Social para este tipo de trabajadores, según indicó en rueda de prensa Enma Mateos, del equipo de Sociólogos Ioé.

Mateos participó junto a Isabel Otxoa, de la Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkia, en la presentación de un jornada que se iniciará a las siete de la tarde en Bilbao bajo el lema 'Sacar el empleo doméstico de la economía sumergida', organizada por la citada asociación y por la Plataforma Estatal de Asociaciones de Trabajadoras de Hogar, con el apoyo de la Asamblea de Mujeres de Bizkaia.

Mateos indicó que en Euskadi, en el segundo trimestre del 2009, el número de personas ocupadas en empleo de hogar fueron 24.318, aunque, según dijo, "el dato debe ser tomado con cuidado porque la EPA no publica el empleo de hogar por comunidades autónomas".

Según dijo, los afiliados en el régimen especial de Empleadas de Hogar en Euskadi en marzo del 2010 fueron 14.553. De ellas, según Mateos, 7.244 eran españolas y 7.309, extranjeras.

Las estadísticas de la Asociación de Trabajadoras de Hogar de Bizkaia hasta septiembre de 2009 indican que, de las 142 personas que se acercaron a la asociación, el 70 por ciento eran inmigrantes y, de ellas, el 69 por ciento estaban en situación irregular.

De las trabajadores que hacen labor externa, sólo un tres por ciento cobraba el salario mínimo interprofesional y, de las internas, el cien por cien de las trabajadoras realizaban una jornada de trabajo que superaba la diez horas al día, mientras que el 82 por ciento no cobrara el salario mínimo que le correspondería en función de la jornada realizada, mientras que un 40 por ciento de las externas, y un 56 por ciento de las internas, no están dadas de alta en la Seguridad Social.

Economía sumergida"

Conocidos estos datos, la jornada de hoy, que pretende "sacar el empleo doméstico de la economía sumergida", tiene como objetivo, según Otxoa, solicitar "cambios legales" en la normativa y ofrecer "testimonio sobre la cantidad de personas que están en economía sumergida".

La responsable de la asociación informó de que, durante el simposio se analizarán "cuáles son los problemas de la Ley de Extranjería para las empleadas doméstico" o por qué los servicios públicos de empleo "no intervienen en el empleo doméstico y sólo lo hacen Cáritas o las agencias privadas de colocación".

En ese sentido, Otxoa subrayó que "hay que luchar contra la invisibilización de las empleadas de hogar", derivada del hecho de que las encuestas "exceptúan el trabajo de las empleadas domésticas".

La responsable de la asociación aseguró que "tiene que haber voluntad política para salir de la economía sumergida", porque, según indicó "si no hay control por parte de la Inspección de Trabajo, esto es agua de borrajas".

Pidió también una reforma en la Ley de Extranjería para que las empleadas no autóctonas tengan permiso de trabajo, así como que este tipo de trabajo se incluya en las estadísticas y se le "dé formalidad, gracias a un contrato escrito, que en los demás sectores es obligatorio, con "recibo de salarios".