Así lo avanzó hoy, en rueda de prensa, la secretaria primera de la Mesa de las Cortes, Matilde Valentín, que señaló que el escrito presentado por los diputados del Grupo Parlamentario Socialista —aprobado por mayoría— pide la retirada "ante la constatación de que el Grupo Parlamentario Popular no ha apoyado en la Comisión Constitucional el texto de la reforma del Estatuto".

El escrito aportado por los socialistas considera que el PP ha actuado "quebrando con ello la unanimidad lograda en la Cámara de Castilla-La Mancha y haciendo imposible obtener en el pleno del Congreso la mayoría necesaria para su aprobación". Valentín especificó que este proceso no paraliza todavía la tramitación de la reforma, algo que se consolidará cuando el pleno exprese su opinión y esta se remita al Congreso.

Según una resolución de la Presidencia de las Cortes de Castilla-La Mancha, publicada el 16 de febrero de 2007 en el Boletín Oficial de las Cortes de Castilla-La Mancha, que dicta las normas a seguir para la retirada de las propuestas de reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, la solicitud de retirada de la reforma deberá ser suscrita por, al menos, una quinta parte de los diputados o por los dos grupos parlamentarios.

Mayoría simple

Ese debate se ajustará a las normas establecidas por el Reglamento de las Cortes para los Proyectos de Ley, y la aprobación de la solicitud de retirada "requerirá el voto favorable de la mayoría simple de los diputados". Una vez adoptado el acuerdo de retirada, el presidente de las Cortes lo comunicará inmediatamente al Congreso y al Senado.

La resolución, firmada por el ex presidente del Parlamento, Fernando López Carrasco, y recogida por Europa Press, establece, además que una vez retirada la propuesta "no podrá volver a ser presentada una nueva propuesta de reforma del Estatuto de Autonomía hasta que haya transcurrido un año desde la votación de aquella en las Cortes de Castilla-La Mancha.

El texto se publicó después de que el 6 de febrero de 2007 la Mesa del Congreso de los Diputados calificara y admitiera a trámite la propuesta de reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, aprobada el 29 de enero de ese año, y en él se especifica que las Cortes "podrán retirar cualquier propuesta de reforma que hubiera sido admitida en las Cortes en cualquier momento de su tramitación".