Las víctimas también podrán optar a subvenciones para alquiler: si cobran hasta 470 euros al mes, la Xunta les pagará el 80% del precio del piso, y si cobran hasta 1.175 euros, la ayuda llegará al 70%.

Un salario para ser libres

La conselleira de Vivenda, Teresa Táboas, la secretaria xeral de Igualdade, Carme Adán, y la directora del Servicio Galego de Igualdade, Ana Luisa Bouza, presentaron ayer miércoles estas iniciativas de la Xunta para luchar contra la violencia doméstica.

Sólo el 10% de las mujeres maltratadas en Galicia dan el paso de denunciar. Y cuando lo hacen, lo más difícil es abandonar su casa. Por eso, en 2006, la ley gallega integral contra la violencia de género incorporará el derecho de las víctimas a recibir el llamado «salario da liberdade», de 600 euros al mes.

Por otra parte, los médicos de familia de Galicia denunciaron ayer que cada vez se enfrentan a más casos de violencia doméstica. La detección precoz del maltrato es una prioridad, según el presidente de la Sociedad Española de Medicina Familiar, Luis Aguilera. Además, los médicos señalan que el 80% de los maltratadores tienen una conducta violenta por consumo abusivo de alcohol, precariedad laboral y antecedentes familiares de violencia. Sólo el 20% de estos hombres sufren trastornos psicopatológicos.

Los sindicatos pidieron, además, medidas especiales contra el maltrato.

Vigo, ciudad con más denuncias

La ciudad olívica es, dentro de Galicia, la población en la que se registra un mayor número de denuncias por episodios de violencia doméstica. Entre enero y junio de este año se pusieron 407. La Casa de Acogida para mujeres maltratadas de Vigo acogió el año pasado a 29 víctimas de malos tratos y 34 menores. A mes y medio de que finalice éste, las mujeres que han pasado por este centro ya igualan la cifra de 2004. Frente a esta evolución está el caso coruñés: allí  ingresaron hasta la fecha 27 mujeres y 35 niños en la Casa de Acogida, 18 casos menos que el año anterior.