"Como siempre que los resultados no le son convenientes, ya desde la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias se han apresurado a restar valor a este sondeo diciendo que no son datos definitivos. Y aunque efectivamente no son finales, sí son aproximativos y ayudan a visualizar la situación de tan trascendental asunto en el archipiélago", indicó NC.

En opinión del partido que preside Román Rodríguez, "la Educación no es una prioridad para el gobierno de CC y PP, mientras que no consideró necesario que se elaboren estudios por parte del Ministerio pertinente, sino que basta con observar "el día a día".

NC se refiere así al recorte presupuestario que se ha aplicado a la Consejería o al deterioro de las relaciones entre el Gobierno canario y los docentes, que han estado en constante conflicto desde el inicio de la actual legislatura. Pero también, la formación apuntó al desmantelamiento de la Formación Profesional o a la degradación de las escuelas oficiales de idiomas, "a pesar de que Paulino Rivero quiere una Canarias bilingüe".

"Los servicios públicos no son esenciales para el Gobierno conservador de CC y PP, cuya gestión se puede calificar como política de escaparate que se resume en salvar los muebles, pero no en proyectar el futuro de esta tierra y sus ciudadanos", explicó.

En este sentido la organización nacionalista afirmó que "los datos son incontestables y no se los inventa la oposición", en referencia a los estudios que sitúan a Canarias a la cola en la aplicación de la Ley de Dependencia, la valoración que hacen los ciudadanos de la situación de la Sanidad o los índices de fracaso escolar y abandono temprano de la escolaridad en las Islas.

"El Gobierno de Canarias no está por la labor de gestionar y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos", sino de llegar a 2011 asegurándose de que, mediante el control pertinente, la Televisión Canaria se encarga de "vender" algunas falsas banderas como la policía autonómica, los pactos anticrisis firmados con empresarios y sindicatos que quedan en nada o el constante anuncio de medidas contra la crisis y por la creación de empleo, que no tienen el más mínimo impacto.