Coldplay se gana al público madrileño con un espectacular directo

Los británicos Coldplay ofrecieron esta noche en el Palacio de Deportes de Madrid un espectacular directo que protagonizó la buena música y la camaleónica voz de su líder y pianista, Chris Martin, que consiguió ganarse al público desde la primera nota.
Chris Martin, líder de 'Coldplay' (Efe).
Chris Martin, líder de 'Coldplay' (Efe).
Efe
Chris Martin, líder de 'Coldplay' (Efe).

Coldplay arrancó con los temas "Square 1" y "Politik", una pequeña muestra del derroche de energía que resultaría ser el resto del recital, y siguieron con "Yellow", uno de sus éxitos más reconocidos, con la que el vocalista dio la bienvenida en español al auditorio a la vez que varios globos de tamaño gigante y color amarillo caían desde el techo.

Tras los temas "Speed of Sound" y "God put a smile", llegó el turno a la canción que da nombre a su último trabajo, "X & Y", un trabajo que en su momento definieron como "emocional, a la vez que triste y esperanzador", y al que le preceden los discos "Parachutes" (1998) y "A rush of blod to the head" (2002), con los que han vendido más de 16 millones de copias.

Vestidos de riguroso negro, los cuatro componentes de Coldplay, Chris Martin (piano y guitarra), Guy Berryman (bajo), Jonny Buckland (guitarra) y Will Champion (batería), improvisaron en la mayoría de las canciones con una notable tendencia a los estallidos de guitarras -dejando claro que ante todo son una banda de directo-, y los solos de voz de Martin, que dio muestras de una voz versátil y llena de texturas.

Un "ahora toca bailar" introdujo el tema "God put a smile", una canción en la que la formación inglesa mezcló frases del "Yellow Submarine" de The Beattles; y es que, aunque a Coldplay se les ha colgado el cartel de herederos de grupos como U2 o The Smiths, esta noche demostraron tener una identidad y sonido propios.

Otro de los protagonistas de la noche fue el escenario que, en apariencia sencillo, incluía una pantalla al fondo y varios cañones de luz que vistieron de manera versátil cada una de las 18 canciones del repertorio, con diferentes colores y texturas, además de una cuidada producción audiovisual.

El tema "Clocks" era uno de los más esperados por el público que, ya de por sí entregado, saltó en un aplauso con las primeras notas y coreó la canción junto a Martin y el resto de componentes.

Aunque parecía que este tema pondría punto y final al concierto, Coldplay se dejó lo mejor para el final, los temas "Swallowed", "In my place" y "Fix you", esta última la guinda pausada de un concierto al borde del infarto.

Aunque Martin intentó superar las barreras del idioma, esta noche se dirigió al auditorio en un castellano en ocasiones inteligible, pero lo que sí dejó claro a las catorce mil almas asistentes fue el "hasta pronto" con el que se despidió de Madrid.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento